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02-01-2025
Pasados ya unos días del fallecimiento de Jorge Lanata, quisiéramos en esta nota reflexionar sobre lo que, en nuestra opinión, es el legado conceptual más permanente y profundo que nos dejó el gran periodista. Vale decir, su lucha contra esa falaz concepción por la cual la corrupción pública tiene causas ideológicas: el neoliberalismo según los kirchneristas, el estatismo según los mileistas. Para de ese modo cada facción excusar a los suyos y condenar a los ajenos en el principal mal político argentino. Lanata combatió contra la corrupción de cualquier signo ideológico y eso no le gustó ni a los suyos ni a los ajenos. Pero sí al pueblo en general. Por lo que logró romper con todo sectarismo y expresar, como muy pocos, la irrenunciable lucha de la verdad contra cualquier ideología que pretenda ocultarla o reemplazarla. Vaya entonces, nuestro reconocimiento.