Opinión
Liderazgos compartidos - Por José Luis Toso
Más allá del lugar que le toque ocupar como diputado, Cornejo quiere que el radicalismo defina el rol opositor que le tocará asumir.
Más allá del lugar que le toque ocupar como diputado, Cornejo quiere que el radicalismo defina el rol opositor que le tocará asumir.
Hay mucha injusticia, mucha desigualdad social y una dirigencia que no ve claramente lo que sucede a su alrededor.
La situación del país lleva a muchos a abandonar la patria. Pero hay algo que siempre se lleva de ella.
Los argentinos sufrimos la tendencia de analizar el mundo, algo que durante las últimas jornadas hemos visto con respecto a Bolivia,
Tal vez no hay secreto y solo se trata de un perturbado más, o tal vez sea un tipo muy solo o muy triste.
El próximo gobierno tiene la idea de reactivar el consumo interno. No se conocen las medidas y las consecuencias de la expansión monetaria.
Todos debieran tener un trabajo. Porque el trabajo nos dignifica, nos hace sentir útiles y provee de sostén económico a nuestra familia.
Tanto Antonia Macri como Estanislao Fernández son blanco de críticas y ataques sólo porque sus padres son figuras de poder.
Sabemos que hay precios inflados que se rebajan para disfrazarse de ofertas pero es parte del juego que aceptamos jugar.
El continente, por debajo del Río Grande, tiene problemas que vienen del pasado.
El gobernador aspira a un protagonismo político nacional que dependerá del liderazgo que obtenga.
Cornejo se puso un objetivo antes de asumir en 2015 y lo logró: dejará su gestión con un alto apoyo social.
Algún poder maligno había de cernirse sobre todo aquel genio que ofreciera al mundo la sinfonía 9.
La considera una “reforma político-institucional de fondo”. Esa provincia concentra al 38% de la población.
Los perdedores nacionales de ayer quedaron más contentos de lo que esperaban y los ganadores un poco menos contentos de lo que aspiraban.
Suárez espera que alberto fernández cumpla con su promesa de gobernar con todos los jefes de provincia y ofrece su predisposición al diálogo
Algunos tienen decidido su voto. Otros no saben qué hacer hasta que llegan al cuarto oscuro. Como sea, ya somos expertos en votar.