Ya dio vuelta la página. Si bien la procesión va por dentro, parece que la pesadumbre duró poco. Es que el mendocino Julián Santero no tuvo demasiado tiempo para ponerse a pensar en la carrera más importante de la temporada que el reciente domingo no terminó a causa del maldito balancín.
El día después de la definición sobre el Roberto Mouras lo vivió en el mismo autódromo ya que su escuadra, en conjunto con la técnica de la Asociación Corredores Turismo Carretera, lo invitó para subir al Torino de Mauricio Lambiris. Fue, acaso, para ir delineando su futuro en Turismo Carretera tras su brillante paso por TC Pista con el Chevrolet.
Volviendo al cierre del Play Off, hasta los primeros minutos de competencia saboreó el título. La Plata lo volvía a poner en lo más alto del automovilismo nacional. Sin embargo, una falla lo obligó a ir a boxes y la esperanza de campeonar se terminó cuando los mecánicos del Dole Racing le señalaron que detuviera el impulsor. Luego, vino la consagración de Nicolás Cotignola.
Sobre lo que significó quedar a las puertas del reinado, lo que hubiese derivado en un doblete con el Chivo ya que el año pasado resultó monarca de TC Mouras, nuestro crédito sostuvo a Más Deportes que "no hubo mal trago. Sinceramente, me lo tomé bastante tranquilo; no sé bien por qué".
A su vez, el ex campeón de Fórmula Renault manifestó que “lo asumí bien. Pensé que iba a reaccionar mal. Son fierros y en las carreras de autos puede pasar cualquier cosa. Es una lástima, pero ahora ya hay que pensar en lo que vendrá”.
Santero llegó a la última cita con 15 puntos menos que el hombre de Torino y se puso a 12 tras adjudicarse su serie. Llegando segundo y con Cotignola fuera de los seis mejores de la final era campeón, pero la fortuna no lo acompañó.
“Duele porque estaba en juego un título, pero en realidad no siento que lo haya perdido. Tenía chances de ganarlo pero no estaba primero en el campeonato. Si estaba adelante, pienso que sí hubiese sido más grave. No hay otra que mirar para adelante”, afirmó.
Volver al TN en un equipo consagrado
Matías Rossi no seguirá en la Clase 3 de Turismo Nacional ya que eligió el proyecto de Toyota para ingresar a la Top Race V6 en 2017.
Así, el ex campeón dejará Citroën y Juan Manuel Silva posiblemente siga ese camino, por lo que los C4 Lounge no tienen pilotos para el próximo año.
Santero figura entre varios postulantes. Alejado desde la novena fecha por cuestiones presupuestarias, el nacido en Guaymallén aseguró que “faltan unos días para definir. Aún no tengo nada concretado. Sería lindo volver y trabajo para correr desde 2017”.
Luis José Di Palma, que fue confirmado por Renault para sustituir a Christian Ledesma desde la próxima temporada de Súper TC 2000, es también candidato para Citroën que actualmente tiene 3º a Rossi y 23º a Silva en el certamen.