En dos partidos con Matías Minich como técnico interino, Independiente Rivadavia consiguió, más allá de un triunfo y una derrota, una identidad de juego que el hincha aplaudió a rabiar en el triunfo ante Deportivo Morón, 2-1. Por eso la expectativa para la noche de hoy es grande. El duelo ante Temperley, en el estadio Alfredo Beranger, desde las 21.15, puede ser el salto de calidad que le falta a este plantel para empezar a creer.
Más allá de algunas reuniones con entrenadores, la dirigencia parece decidida a dejar que el ex delantero finalice el año en el banco de suplentes.
Ya lo había dicho Minich en la semana: "Quiero seguir siendo el entrenador de Independiente Rivadavia". La dirigencia parece decidida a darle el gusto.
El buen rendimiento incluye repetir el mismo equipo que superó al Gallito, más allá de algunos sobresaltos que pusieron en discusión el triunfo. La vuelta del goleador Gonzalo Klusener fue un plus que le dio al equipo otro rodaje.
Minich elige cambiar un nombre en el banco de suplentes: Franco Ábrego (quien vuelve tras la expulsión) estará entre los convocados, mientras que Lautaro Disanto no viajó.
En el rival, Walter Perazzo, su entrenador, confirmó los titulares y repetirá los mismos que vienen de vencer a Platense, en condición de visitante, por la mínima diferencia. En el Gasolero habrá un viejo conocido, Mauro Cerutti.
El encuentro de esta noche será dirigido por el colegiado Julio Barraza, quien estará acompañado de Duilio Montello y Mauro Ramos Errasti.
La delegación azul.
En el banco de suplentes estarán Joaquín Mattalía, Enzo Suraci, Franco Ábrego, Ignacio Irañeta, Nicolás Quiroga, Lucas Fernández y Sergio González.