Una mujer que vive en el barrio La Primavera, en San Martín, encontró a su sobrino jugando en el patio con un objeto que, a primera vista, la pareció un proyectil de mortero. Luego se comprobó que era una antigua granada y se montó un operativo para neutralizar su poder destructivo.
Según lo declarado por el menor, había encontrado el proyectil semienterrado en un descampado frente a la casa de su tía, Andrea Traslaviña, ubicada en la manzana “E” de ese vecindario.
Con la premura del caso, la mujer de 32 años llamó al 911, lo que movilizó a la Brigada de Explosivos que llegó hasta el lugar alrededor de las 18.30.
Ahí el personal trabajó sobre el artefacto identificado como una granada con el número 1950 (podría ser el año de fabricación) y la identificación 410.
Tras la revisación, se comprobó que el artefacto se encontraba deteriorado por el tiempo y también la faltaba el detonador. De todas formas, el elemento fue retirado por los efectivos.