El que puede, puede... Y Susana Giménez se puede dar el gusto de dilapidar una pequeña fortuna en zapatos que quizá no use jamás. Este historia nos lleva sin escalas a Miami donde la diva descansa junto a su amiga Teté Coustarot.
Allí, obvio, salen de compras. No a cualquier lado, a Bal Harbour. En este centro comercial no dudan en elegir exóticos accesorios para aumentar vestidores inmensos. Lo de Su fue amor a primera vista. Ella se enamoró de un par de Dolce & Gabbana rarísimo.
A éste hay que sumarle sus lentes que la hacen ver como una suerte de Gatúbela electro pop. Sobre los zapatos, gastó nada menos que 60 mil pesos. Una ganga para ella.
Mirá las fotos que publicó Gente:
