Cada clásico entre River y Boca constituye por sí mismo una historia fascinante pero hacía mucho que no se encontraban en circunstancias como las de esta noche, una eliminatoria sin retorno, en la que uno seguirá adelante y el otro quedará eliminado.
El ataque de la facción disidente de la barra de River a integrantes del grupo que lideran la hinchada en la confitería del club sembró el temor por un posible nuevo enfrentamiento (ver aparte), pero desde el club y los organismos de seguridad descartaron modificar el operativo que ya estaba programa. El partido de ida finalizó 0-0, de modo que el que gane hoy se clasificará finalista, si vuelven a terminar sin goles habrá penales y cualquier otro empate favorecerá a Boca, que en tal caso prevalecerá por el plus de los tantos logrados en condición de visitante.
Malo, sin lugar para ningún eufemismo, resultó el primero, pleno de interrupciones, discusiones, con un arbitraje de Silvio Trucco que dejó mucha tela para cortar y con un ausente notorio: el fútbol.
El equipo de Marcelo Gallardo, que el domingo último, con suplentes, cedió frente a Racing la punta de un campeonato local que venía dominando desde el comienzo, contará con el retorno del delantero Rodrigo Mora, recuperado, en lugar de Giovanni Simeone y faltará, lesionado, Jonatan Maidana, a quien suplirá Germán Pezzella. Además, el Millo contará con el plus de tener como alternativa entre los suplentes a Fernando Cavenaghi, quien sumó minutos ante Racing luego de seis meses de inactividad y será una alternativa para el ataque.
El Xeneize, que también con equipo mayoritariamente alternativo viene de imponerse a Independiente, no contará con Juan Manuel Martínez, que no volverá a jugar hasta el año próximo, y para reemplazarlo el entrenador Rodolfo Martín Arruabarrena se decidió por Federico Carrizo. Más allá de eso, la noticia del día fue que Andrés Chávez no completó la última práctica, por una molestia en el isquiotibial derecho y aunque se confía en que pueda estar, de no ser así lo reemplazará Emmanuel Gigliotti.
Aunque ya no dependen de ellos en el ámbito local, esta noche se juegan al todo o nada en la Copa.