El delantero uruguayo Luis Suárez aseguró hoy que "trata de olvidar" todo lo relacionado con el famoso mordisco en el Mundial 2014, que le costó una grave sanción de la FIFA que le prohí¡be jugar al fútbol durante cuatro meses, y prometió que ese comportamiento no se repetirá.
Más de un mes después de que Barcelona anunciara su contratación, Suárez fue presentado oficialmente en conferencia de prensa en el Camp Nou, donde transmitió sus primeras sensaciones como jugador del club catalán.
"Todaví¡a no caigo, no lo puedo creer, lo soñaba, pero no puedo creer que pueda cumplir este sueño tan bonito", expresó el delantero charrúa, acompañado por el director deportivo del club, Andoni Zubizarreta y el vicepresidente deportivo, Jordi Mestre.
"Lo que vengo a hacer es aportar algo para conseguir tí¡tulos, que es lo que quiero", remarcó.
"Hubo opciones de otros equipos, pero estaba la del Barsa y no lo dudé porque era mi sueño de chico", añadió Suárez, quien no quiso aclarar si Real Madrid, eterno rival del Barcelona, le hizo una oferta.
La presentación del delantero uruguayo, por el que el Barcelona pagó 81 millones de euros al Liverpool inglés, a pesar de que no podrá jugar hasta el 24 de octubre, tiene lugar después de que el TAS (Tribunal Arbitral del Deporte) rechazara rebajarle la sanción que le impuso la FIFA por el mordisco al italiano Giorgio Chiellini en el Mundial de Brasil.
Suárez tendrá que seguir cumpliendo nueve partidos oficiales con Uruguay y cuatro meses fuera de los terrenos de juego, pero el TAS le permitió entrenar con el Barcelona y jugar amistosos.
El viernes fue su primer entrenamiento con el resto del equipo y anoche jugó sus primeros minutos con la camiseta azulgrana durante el torneo Joan Gamper (6-0) frente al León, bicampeón del fútbol mexicano.
"Nunca habí¡a jugado en el Camp Nou, era sentir la sensación, tener el contacto con la gente, me gustó", explicó sobre su primer contacto con el estadio catalán.
"Me duelen los pies de no usar los botines de fútbol", apuntó en otro momento de la conferencia.
En cuanto al tema de la sanción y de su comportamiento, Suárez quiere mirar hacia delante: "La sanción es la que es, hay que aceptarla. He tratado con profesionales adecuados, es un tema privado. Ya lo asumí¡".
"Prefiero no volver atrás. Después de lo que me pasó tuve dí¡as en los que estaba muy deprimido, no querí¡a hacer nada. Sabí¡a que tení¡a que pedir perdón, a la gente del fútbol, al jugador, a la gente de Uruguay, y ya lo he hecho", añadió.
"Claro que me preocupé no solo por el fichaje, por si peligraba, sino también por mi persona. Pero trato de borrarlo", admitió.
"La lección es clara. La lección la debo tomar conmigo mismo. Fui yo quien me equivoqué, lo pasado, pasado", insistió.
"Ya dije que intenté olvidar el mordisco. Les digo a los fans que no se preocupen porque no lo volveré a hacer, no se repetirá", completó.
"Estar entrenando y convivir con gente nueva se te pasa más rápido y espero que se pase aún más rápido", comentó respecto a la espera que tendrá antes de debutar oficialmente con Barcelona.
Suárez cumple sanción el 24 de octubre, y el 25 o 26 se disputará el clásico ante Real Madrid en el Santiago Bernabéu.
Ante la posibilidad de jugar aquel partido, el delantero se mostró entusiasmado: "El objetivo es entrenar duro y trabajar fuerte para el dí¡a que pueda debutar".
"Creo que no va a haber ningún problema pero depende del entrenamiento y del entrenador", aseveró respecto a la posibilidad de jugar aquel partido de Liga.
Sobre su eventual protagonismo en la delantera del Barcelona, Suárez manifestó que está "preparado para jugar en cualquier posición de ataque".
Finalmente elogió a sus compañeros del Barcelona, especialmente a los cracks Lionel Messi y Neymar. "Está claro que la calidad de Leo y Neymar es admirable. Es espectacular, ayer te daban ganas de pararte y aplaudir".
"Todo el mundo sabe lo que pueden dar. Yo, por mi parte, vengo a aportar, y tengo ganas de hacer cosas importantes. Aportar mucho trabajo, con humildad y sacrificio", cerró
