La final del Abierto de Estados Unidos, en la que el croata Marin Cilic se impuso al japonés Kei Nishikori, libró otra batalla inédita en un Gran Slam entre las marcas de ropa deportiva china Li-Ning, recién llegada al tenis de alto nivel, y el gigante nipón Uniqlo.
En la pista Arthur Ashe, no sólo estuvieron ausentes las estrellas del "Big 4" -Nadal, Djokovic, Federer y Murray- sino las grandes marcas como Nike y Adidas.
A la cita acudieron en cierta forma los segundones. Uniqlo, que está tratando de conquistar mercados extranjeros, cree que fue una "muy buena operación para su renombre mundial".
Desde el 3 de septiembre, el gigante japonés del prêt-à-porter sabía que estaría en la final del US Open ya que en la ronda anterior se enfrentaban dos jugadores a los que viste: Novak Djokovic y Kei Nishikori.