Spieth volvió a ser humano

El norteamericano parecía sacar una ventaja determinante, pero sufrió mucho los últimos hoyos y el torneo está abierto. Entre los argentinos, Cabrera y Grillo pasaron el corte y Fabián Gómez tuvo que despedirse.

Spieth volvió a ser humano

El Masters de Augusta lo llevó al Olimpo y el Masters de Augusta lo ha devuelto al mundo real. Y es que Jordan Spieth sufrió por primera vez la fiereza de este campo tan especial. A pesar de todo, el texano es líder con un golpe de ventaja sobre un Rory McIlroy que busca recuperar el trono perdido. Sergio García sigue con plenas opciones de triunfo al terminar a cuatro golpes de la cabeza.

Mientras que los argentinos Angel "Pato" Cabrera y Emiliano Grillo quedaron a seis golpes, en el puesto 23. Cabrera firmó un giro con 73 impactos, uno sobre el par de la cancha, producto de tres birdies (hoyos 10, 16 y 17) un doble bogey (15) y dos bogeys (2 y 5), y en total acumula 146 (+2).

Por su parte, Grillo, debutante en este Major, hizo hoy 75 (+3), por cuatro birdies (2, 7, 12 y 15), un doble bogey (16) y cinco bogeys (1, 3, 6, 11 y 18), y también marcha con +2. Por su parte, el chaqueño Fabián Gómez no pasó el corte clasificatorio y quedó eliminado.

El panorama se presentaba desolador en el hoyo 3. Spieth se colocaba con -8 a un mundo de sus rivales. Parecía un calco del paseo del americano en 2015. De pronto todo cambió. Jordan perdió el control y los greenes se declararon en rebeldía.

Pocas veces se ha visto tan errático a Spieth. El idilio se rompió y Spieth (-4) experimentó con sus propios ojos lo que sienten los mortales en este templo del golf para terminar por encima del par del Augusta National por primera vez en su carrera.

El tambaleo de Jordan lo aprovechó su archi rival: Rory McIlroy (-3). El norirlandés está dispuesto a complicar al tirano y reclamar el único 'major' que falta en su palmarés. Y es que la lucha por la Chaqueta Verde podría deparar la primera gran batalla entro los dos íconos golfísticos del planeta en la mejor alfombra posible.

Esta lucha de titanes no hubiese sido posible si el sorprendente y peculiar DeChambeau no hubiese naufragado en el hoyo 18 cuando incluso luchaba por acabar en su primera aparición en Augusta. Este jugador amateur, llamado a hacer historia o incluso transformarla, fue el único capaz de disfrutar del viento durante 17 hoyos. Augusta es así de cruel. Un error y un triple bogey al bolsillo. Pero DeChambeau aprende mucho y rápido. Será difícil que algo así le vuelva a suceder.

No muy lejos de la cabeza marcha Sergio García. Sí, otra vez Sergio. 15 años después sigue siendo la mejor opción española para ganar un "grande". Su +3 en el día no hace justicia de sus buenos tiros. Si el fin de semana sopla mucho el viento y el campo se pone aún más duro estará arriba hasta el final.

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