Joseph Blatter tiene previsto llegar hoya Rusia para su primer viaje internacional desde que varios dirigentes de la FIFA y empresarios de marketing deportivo fueron arrestados en mayo en Suiza por un escándalo de corrupción.
San Petersburgo será escenario el sábado del sorteo de las eliminatorias para la Copa del Mundo de 2018, en el que será el último acto oficial del presidente de la FIFA antes de las elecciones especiales programadas para febrero.
El dirigente no corre peligro de ser detenido en Rusia, ya que este país no tiene tratado de extradición con Estados Unidos.
Blatter no ha sido acusado por las autoridades estadounidenses o suizas, pero las repercusiones de las pesquisas de ambos países lo obligaron a anunciar el mes pasado que dejaría el cargo, apenas cuatro días después de ser reelegido, y a quedarse en su país natal Suiza.
Desde el 27 de mayo, cuando la policía en Zúrich arrestó a los dirigentes de la FIFA a pedido de Estados Unidos y allanó la sede de la FIFA, Blatter se ausentó de dos eventos del organismo: el Mundial Sub20 en Nueva Zelanda y la Copa del Mundo de mujeres en Canadá.
Blatter confirmó recientemente que ``hasta que todo se aclare, no me arriesgaré con ningún viaje''.
Ahora regresa a un acto oficial al lado de una figura igualmente polémica en Estados Unidos, el presidente ruso Vladimir Putin.
Se espera que Blatter y Putin hablen ante los dirigentes y técnicos de las federaciones invitadas a la ceremonia en el Palacio Konstantinovsky, en el que se dilucidará el rumbo de la clasificación para el campeonato que se jugará entre junio y julio de 2018 en Rusia.
La última vez que Blatter salió de Suiza fue a mediados de mayo, cuando voló en su jet privado a Israel para asistir a reuniones en Jerusalén y Cisjordania.
