Los principales dirigentes europeos viajarán el domingo a París para expresar su solidaridad con Francia, tras el atentado contra Charlie Hebdo y las posteriores tomas de rehenes que concluyeron con la muerte de tres yihadistas y cuatro de los secuestrados.
Ante la conmoción causada por estos atentados sin precedentes en Francia en más de 50 años, el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, y el primer ministro británico, David Cameron, dos países que sufrieron duros atentados yihadistas, anunciaron que participarán en una marcha "republicana" por la unidad nacional convocada en Francia.
En la manifestación, donde el presidente François Hollande será el anfitrión, estarán también presentes la canciller alemana, Angela Merkel, el primer ministro italiano, Matteo Renzi, y los dirigentes europeos Jean-Claude Juncker, Donald Tusk y Federica Mogherini.
Igualmente asistirán los jefes de gobierno de Dinamarca, Holanda, Malta, Finlandia, Luxemburgo y Portugal, que respondieron a la invitación del presidente francés.
Dos días después del mortal atentado contra el semanario Charlie Hebdo en el centro de París el miércoles y del tiroteo que costó la vida el jueves a una agente de policía, la persecución de los sospechosos tomó un rumbo trágico este viernes cuando el asalto en Dammartin-en-Goële, a unos 40 km al noreste de París, donde permanecían los dos presuntos autores del ataque al semanario, terminó con la muerte de ambos.
Además, la toma de rehenes en una tienda kósher en el este de París ejecutada por un hombre presuntamente vinculado a los yihadistas, se saldó con cinco muertos, incluido el secuestrador.
Las condenas a los atentados llegaron desde países y organizaciones con visiones del mundo diametralmente opuestas.
Este viernes, el ministro israelí de Exteriores, Avigdor Lieberman, expresó su preocupación por la "ofensiva terrorista" en Francia.
Mensajes de Cuba y Corea del Norte
También se expresaron los históricos enemigos de Israel, Irán y el partido libanés Hezbolá, que condenaron los atentados.
"La violencia y el terrorismo son condenables tanto en los países de la región como en Europa o en Estados Unidos", dijo el presidente iraní, Hasan Rohani.
Aunque sin referirse no obstante a la matanza de la revista Charlie Hebdo, el jefe del Hezbolá, Hasan Nasralá, condenó "la conducta de algunos grupos terroristas que se reivindican del islam", que a "través de sus actos inmundos, violentos e inhumanos", atentan contra el profeta Mahoma.
Por su parte, el presidente cubano, Raúl Castro, envió un mensaje de "condolencia y condena" a Hollande.
Corea del Norte también expresó su "profundo pesar" a las familias de las víctimas, mientras que el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, dijo estar aliviado de que los autores del atentado haya sido abatidos.
En Bruselas, cerca de 150 personas formaron un gran círculo en una plaza del centro de la ciudad, portando las pancartas "Yo soy Charlie". En Estambul, decenas de periodistas se reunieron en solidaridad. En Washington, la Cámara de Representantes guardó un minuto de silencio.
Este viernes, el príncipe Harry de Inglaterra firmó un registro por la memoria de las víctimas, un gesto que el presidente estadounidense, Barack Obama, había hecho el día anterior, y que también realizaron el primer ministro japonés, Shinzo Abe, en Tokio y el portugués, Pedro Passos Coelho, en Lisboa.