Juan Pablo Socino tendrá mañana el momento más lindo vivido en su carrera deportiva. Debutará en el Mundial de rugby con Argentina contra Namibia en Leicester. El centro de los Pumas, que empezó de futbolista como defensa central en las inferiores de San Lorenzo, tuvo que esforzarse mucho para llegar hasta aquí.
Dejó el fútbol con catorce años, porque no le gustaba el ambiente de ese deporte y eran duros los largos viajes desde su pueblo, Los Matreros, en el Gran Buenos Aires, hasta el Bajo Flores, un barrio de la capital.
"Llegué a enfrentarme al Kun Agüero, que estaba en Independiente, y me tocó marcarlo", afirma Socino, que juega en Inglaterra en el Newcastle Falcons, en una ciudad en la que se ha hecho amigo del futbolista Fabricio Coloccini, del Newcastle United.
El jugador del Newcastle Falcons, de 27 años, era el único de los 31 jugadores argentinos en el Mundial que no había disputado ningún minuto.
"Es un sueño. Desde que empezó el Mundial uno espera debutar y jugar. Se hizo esperar, pero ahora a encararlo de la mejor manera y dar lo mejor de mí", dijo el centro del Newcastle.
Tras dejar el fútbol su vida en el rugby no ha sido sencilla. Después de comenzar en Los Matreros, en segunda división, llegó a Europa en 2009, al equipo español Santboiana.
Después recorrió el rugby europeo, pasando por Gales, Francia e Inglaterra. "Yo venía de jugar un Mundial de juveniles con los Pumitas. Mi entrenador argentino conocía al técnico en ese momento en Santboiana y fui a parar allí, en una experiencia nueva que duró tres meses", explica Socino.
Tras pasar por el club catalán, con 21 años, se marchó al Tonmawr, de la segunda división galesa, donde estuvo una temporada.
Sus siguientes clubes fueron el Rotherhan y el Nottingham, ambos de la segunda división inglesa, un año en cada lugar.
En 2012 vuelve a su equipo argentino de Los Matreros, pero está solo unos meses antes de pasar al Dax, de la segunda división francesa, donde permanece otro año, regresando al Rotherham y en una temporada es elegido mejor jugador de la segunda división inglesa, lo que le abre las puertas de la Premier y el Newcastle Falcons.
Periplo en Europa
"Se puede decir que conozco el rugby europeo. De todos los sitios aprendí, conocí gente y viví experiencias nuevas. Tengo amigos por todos lados", añade.
A sus 27 años fue llamado por primera vez por los Pumas el pasado mes de junio, y el duelo del domingo contra Namibia será la tercera vez que vista la camiseta argentina.
"Nunca traté de pensar de si no me veían o podía jugar en Los Pumas. Encaraba los partidos en cada liga que jugué para tratar yo de mejorar lo más posible. Soy muy crítico conmigo mismo y si algo no se daba, lo primero que miraba era lo que yo no hacía o me faltaba y no en que alguien me estuviera viendo", señala.
El centro de Newcastle Falcons es un gran pateador y esta temporada logró 103 puntos en 28 partidos.
"Contra Namibia espero poder demostrar que puedo ganarme un puesto dentro del plantel, para tratar de jugar la Rugby Championship", señala.
Daniel Hourcade, el seleccionador argentino, afirmó que Socino se merecía jugar, no solo este partido, sino otros, por su entrega y profesionalidad en los entrenamientos.
"Para el deportista es difícil no jugar. Pero por mi manera de ser, no cambio a la hora de encarar las cosas. Dejo todo, primero por mí, para seguir creciendo, juegue o no juegue. Y si no me toca, tengo que colaborar con los que van a hacerlo porque formamos un plantel y tenemos el mismo objetivo. Es duro no jugar, pero lidio con eso en mi privacidad, de puertas para adentro", concluye.
Socino ha trabajado duro para llegar al Mundial. Muchos años en segunda división, para tener su recompensa.
