Desbordada de felicidad, con el alma “inflada” y un profundo agradecimiento a Vista Flores, su pequeño pueblo ubicado en el departamento Tunuyán, Yamina Anchi Venturi, que tiene 30 años y un gran espíritu solidario, inició días atrás una campaña a pulmón tendiente a reunir cajas navideñas y juguetes para niños oncológicos internados en el Hospital Notti. El resultado fue inesperado.
En realidad, la idea de reunir juguetes y confituras navideñas para donar a la fundación Tras-Pasar, que funciona en Mendoza y trabaja contra el cáncer infantil, surgió el año pasado, plena pandemia. Y dio excelentes frutos.
Sin embargo, cuando retomó la idea este año, a través de sus redes, los gestos que observó fueron maravillosos e impensados, según ella misma graficó.
“Solemos estar habituados a celebrar estas fechas en familia y en nuestro hogar, pero jamás pensamos en los niños o en las familias que luchan contra el cáncer en los hospitales”, reflexionó la joven, para agregar que, cuando se actúa con empatía, “la felicidad desborda por los poros”.
“Elaboré un flayer muy casero pidiéndole ayuda a la gente, en especial a los vecinos de mi pueblo y la respuesta me dejó sorprendida. Durante muchos días recibí, a cualquier hora del día y la noche, juguetes nuevos, productos navideños e inclusive dinero en efectivo para comprar lo necesario. Mi casa quedó repleta de donaciones, fue muy emocionante. Tanto, que no puedo explicarlo con palabras”, se emocionó.
Voluntaria de Cáritas desde muy niña, Yamina, que vive con sus padres, trasladó junto a su hermana la gran cantidad de donaciones recibidas para entregarlos en la fundación, con sede en Mendoza.
“Pude observar los resultados de actuar con perserverancia, porque día tras días compartía el flayer sin detenerme jamás. Y también viví en carne propia la solidaridad de los mendocinos. Solo puedo decir gracias. Esto es un puntapié para seguir en carrera”, puntualizó, para agradecer a Mercedes Carrión, fundadora de Tras-Pasar, su acción de todos los días en pos de los chicos internados en el Notti.
Profundo sentimiento solidario
Es que la historia de Mercedes también tiene un trasfondo profundo y solidario: Camila, su única hija de siete años no pudo superar un cáncer y falleció en 2010.
Cuando pudo ponerse de pie sintió que debía ayudar a las muchas familias que, al igual que ella, transcurrían días y meses internadas en el hospital a la espera de una mejoría.
Y así se decidió a fundar esta asociación sin fines de lucro que trabaja en la lucha contra el cáncer infantil y que necesita voluntarios para sumarse a su proyecto.
Necesita, en definitiva, corazones como el de Yamina: desinteresados y voluntariosos.
“Cuando uno conoce esta realidad es imposible mirar hacia el costado, no pude quedarme de brazos cruzados. Me quemó el dolor de ver partir a mi hija pero siempre supe que debía seguir adelante”, había dicho Mercedes en una entrevista con Los Andes el pasado 3 de septiembre.
Su fundación, que en este caso reunió juguetes, realiza una tarea mucho más abarcativa para ayudar a las numerosas familias que luchan por sus hijos.
Realizan trámites, brindan alojamiento, gestionan ayudas de todo tipo y está atenta al suministro de la medicación.
“Hay cuestiones básicas que muchos padres no pueden afrontar, como traslados, alimentos adecuados, viviendas en condiciones. Solemos intervenir incluso para lograr más confort cuando se deben pasar días y meses en los hospitales, como wifi, ambientación en salas de espera y camas cómodas para los acompañantes”, reflexionó.
Colaboración
Quienes deseen colaborar con Tras-Pasar pueden contactarse con Mercedes al 2613 64-3707