La secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, despertó polémica con sus declaraciones al asegurar que “cualquier resfrío” que se presentara este invierno “es coronavirus hasta que se demuestre lo contrario“. Ante el revuelo y las críticas en las redes sociales, la funcionaria aclaró anoche en TV qué quiso decir para no despertar más preocupación.
En diálogo con el canal A24, Vizzotti dijo que para que un resfrío leve pueda confundirse con el coronavirus debe “acompañarlo de una febrícula, o de un dolor de garganta, tos o pérdida del olfato”.
“Tenemos más de 17.000 muestras de virus respiratorios en el país y el 95% de ellas pertenecen al virus SARS-CoV-2″, dijo Vizzotti, quien llamó a la población a “no minimizar cualquier síntoma en este contexto en el que no hay un tratamiento ni una vacuna”.
Por su comparación, la secretaria de Acceso a la Salud reiteró que “lo que nos sucede es que las personas presentan resfríos leves y una pequeña febrícula y piensan que eso lo tienen todos los años y no van a realizarse el testeo”. De allí la importancia de aislarse en casa y avisar al sistema de salud si la persona presentara síntomas leves.
“Es una decisión difícil y una situación incómoda, muchos quizás no tengan lugar para hacer ese aislamiento pero tienen que evitar el contacto con las personas”, resaltó Vizzotti.
Por su parte, el ministro de Salud, Ginés González García, se expresó en esa sintonía y agregó: “Lo que quiso decir es que no se deben subestimar los síntomas leves. Hoy tenemos muchos que tienen síntomas leves y eventualmente son transmisores”.
No obstante, el médico sanitarista y ex ministro y secretario de Salud de la Nación, Adolfo Rubinstein, señaló a Infobae que “no podemos confundir a la gente con la definición de caso sospechoso”.
“Las declaraciones de la secretaria de Acceso a la Salud de la Nación Carla Vizzotti fueron muy desafortunadas porque generan pánico, miedo y una eventual sobredemanda del sistema de salud. Genera que la gente vaya a reclamar el test ‘por las dudas’, por temor a estar infectada y en realidad está resfriada. La mala noticia es que no hay suficientes tests para todos. Hay que reservarlos justamente para los casos sospechosos”, evaluó.