Un emocionante desenlace tuvo lugar en San Clemente del Tuyú, donde una tortuga marina de 130 kilos volvió al océano tras ser rescatada en grave estado y recibir tres semanas de atención en la Fundación Mundo Marino.
El animal, una tortuga cabezona (Caretta caretta) de más de un metro de longitud, fue encontrada agonizando en la playa de Las Toninas por una vecina que paseaba por la costa. La mujer relató que vio a un hombre intentando ayudar al reptil lanzándole agua, pero la situación era crítica: “Apenas respiraba y no podía moverse”, comentó.
Decidida a buscar apoyo, la vecina grabó videos solicitando ayuda. Minutos después, personal de la Fundación Mundo Marino llegó al lugar para trasladar al ejemplar a sus instalaciones.
Juana Caferri, médica veterinaria de la fundación, explicó que la tortuga llegó extremadamente debilitada y con una herida cicatrizada en su caparazón. “No reaccionaba frente a estímulos, lo que indicaba un cuadro severo de debilidad”, detalló. Durante su rehabilitación, el animal recibió tratamiento especializado y atención constante para recuperar fuerzas y garantizar su regreso al océano.
La tortuga cabezona es una especie catalogada como “vulnerable” por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), lo que significa que enfrenta una alta posibilidad de ingresar en la categoría de “en peligro de extinción” si no se toman medidas de conservación.
Las amenazas incluyen la contaminación, las redes de pesca y la destrucción de sus hábitats naturales, lo que hace que cada rescate y rehabilitación sean vitales para la preservación de esta especie.
Tras semanas de cuidados, el gigante marino finalmente recuperó la fuerza necesaria para regresar a su hogar. La liberación fue un momento emotivo tanto para el equipo de la fundación como para quienes siguieron su historia.