En las dramáticas imágenes que se filtraron puede escucharse a la desesperada madre acompañando a su hija hacía la ambulancia. La chica alcanzó a avisar a su familia de que el dueño del local, quien la contrató ese mismo día, le había dado un vaso de agua y en ese momento comenzó a marearse. Fue rescatada por la policía en el barrio porteño de Balvanera.
Al recibir la alerta por parte de su hija la madre llamó de inmediato a la policía. Los efectivos se dirigieron al lugar, donde encontraron a la joven en estado inconsciente y al sujeto poniéndole los pantalones.
Las imágenes de ese dramático momento en la puerta del local, ubicado en Paso 693, fueron tomadas por la propia madre de la chica. La mujer, de quien se preserva el nombre para no identificar a la víctima, estaba en la puerta desesperada esperando para que la dejaran ver a su hija “¿Qué le hizo ese maldito? ¿Qué le hizo?”, gritaba.
En el video puede verse que, tras asegurarse que llegaba la ambulancia, los efectivos sacaron a la joven en una silla de ruedas y la suben a una camilla, mientras pedían a la madre que la acompañara a un centro de asistencia
“Hija mía, ¿qué te hizo?”, dice la mujer al lado de su hija, que está apenas consciente. “Perdóname mamá”, logra responder la chica. “Yo no tengo nada que perdonarte”, contestó la mujer antes de terminar la grabación.
De acuerdo a los investigadores, la joven venezolana estaba en el fondo del comercio y el acusado estaba vistiéndola y poniéndole los pantalones.
El terrible suceso ocurrió el pasado sábado cerca del mediodía, cuando la joven fue citada a un local, de venta de uniformes médicos en la zona de Once, para realizar una entrevista laboral que había coordinado momentos antes por la red social Facebook.
Al parecer, el acusado le pidió cenar el viernes para así “poder hablar sobre el trabajo”, propuesta que fue rechazada por la joven, que luego arregló presentarse el sábado por la mañana.
Según el relato de la madre de la joven violentada, durante la jornada de trabajo, el acusado, identificado por la policía como Irineo Humberto Garzón Martínez, le ofreció varias veces “un vaso de gaseosa o de jugo” que ella aceptó cerca del mediodía.
De acuerdo con su relato ante los investigadores, tras beber un vaso de agua comenzó a sentirse mareada, por lo que le envió un mensaje a su hermana explicándole la situación.