Un reconocido inmunólogo irlandés aseguró que los primeros pasos para triunfar en la batalla contra el coronavirus se están llevando adelante y el final de la pandemia deja de ser un sueño para hacerse cada vez más real. Sin embargo, el especialista aclara que para lograr el objetivo los países ricos deberán ser solidarios.
La opinión la emitió el especialista Luke O’Neill, quien es profesor en la Escuela de Bioquímica e Inmunología del Trinity College de Dublín. El profesional marcó a través de un video que las acciones que se llevan adelante en gran parte del planeta son consistentes para combatir al covid.
En este sentido puntualizó que el avance de la vacunación en los próximos nueve meses serán clave para definir el regreso a la “normalidad”, pero destacó que para conseguirlos será fundamental la cooperación internacional y los países que tienen excedente de vacunas deberán colaborar.
“El objetivo es que el mundo logre la inmunidad de rebaño lo antes posible, y acumulando vacunas esto no será posible”, argumentó O’Neill, y luego agregó: “Si obtenemos protección en nuestros propios países, debemos compartir con el mundo el exceso de vacunas que tenemos. Canadá cuenta con 9 vacunas por persona, Estados Unidos 7, Reino Unido 6, y la Unión Europea 5. Dar el exceso de vacunas a países que las necesitan es imprescindible, ya que permitirá que el mundo logre antes altos niveles de vacunación. Le estamos pidiendo a cada país del mundo desarrollado que se preparen para regalar vacunas, por extraño que parezca”.
La situación de los viajes internacionales
Sobre el retorno de la normalidad a los viajes internacionales, el irlandés señaló: “Una vez que la vacunación esté extendida, aún tendremos que restringir los viajes entre los diferentes países. Si obtenemos protección en nuestros propios países, no vamos a querer nuevas cepas del virus irrumpiendo en el escenario local, mientras otros países son vacunados, y este punto es crucial”.
El inmunólogo señaló que “Una vez que la vacunación esté extendida, aún tendremos que restringir los viajes entre los diferentes países. Ese es el precio que tendremos que pagar para tener cierta libertad y no volver a confinamientos”.
“La libertad implicará la reapertura de actividades, permitirá que ciertos eventos vuelvan a hacerse, eventos de escala internacional empezarán de vuelta a suceder, pero el precio que debemos pagar será el de no poder llevar a cabo viajes internacionales”, concluyó.