El freezer es uno de los electrodomésticos más usados en los últimos tiempos. Congelar alimentos se ha convertido en una de las prácticas más comunes, ya que nos permite ahorrar y también planificar nuestra alimentación diaria.
Sin embargo, congelar no es una técnica apta para todos los productos. Hay alimentos que no son aptos para el freezer y, en caso de congelarlos, hay que tener en cuenta que perderán sus propiedades y nutrientes, por lo que no es aconsejable someterlos a ese tratamiento.
Lo que hay que recordar siempre es una norma básica que no se puede desatender. Nunca hay que volver a congelar un alimento que ya fue freezado.
Esos productos ya estuvieron expuestos a las bacterias y al congelarlos permanecerían latentes y lo deteriorarían.
Alimentos que no se pueden freezar
Huevos cocidos con cáscara
El contenido de agua que hay dentro del huevo se expandirá, lo que puede provocar que se agriete la cáscara externa y se llene de bacterias. Para congelar un huevo, primero se debe batir o separar su clara y su yema.
Pescado
Solo se puede congelar si está suficientemente fresco, sino las bacterias permanecerían latentes en él por efecto del frío.
Leche fluida y yogur
Durante el proceso de congelación, la leche separa su parte líquida de la parte grasa. Una vez descongelada, su consistencia se vuelve granulosa o recupera parcialmente su textura original, pero pierde gran parte de sus características organolépticas o puede ponerse rancia. El yogur, al descongelarse, pierde su textura y puede cortarse.