El presidente Alberto Fernández recibió este miércoles en la tarde en la residencia de Olivos a un grupo de terapistas y trabajadores de la salud para interiorizarse sobre el trabajo que desarrollan en el marco de la pandemia de coronavirus COVID-19 y luego de la carta abierta difundida ayer por la Sociedad Argentina en Terapia Intensiva (SATI).
Acompañado por el ministro de Salud, Ginés González García, el Presidente se reunió con la epidemióloga María Martha Iglesias, la kinesióloga Claudia Mendoza, el médico y miembro de la SATI Arnaldo Dubin, el emergentólogo Alfredo Calixto Ramos, la promotora de salud Rocío Beatriz Domecq, el jefe de Clínica del Hospital Posadas Pablo Díaz Aguiar, la kinesióloga y psicóloga Liliana Coulatti y la psicóloga y operadora terapéutica Paola Lucero.
“Hay un riesgo cierto de saturación. El sistema sanitario llegó al límite, no damos más. La única posibilidad de evitar un desastre es bajar el número de contagios, y no hay otra herramienta más que el aislamiento. La apertura es una invitación al desmadre”, explicó el médico y miembro de la Sociedad Argentina en Terapia Intensiva (SATI) Arnaldo Dubin, matrícula MN 54527, en diario Perfil.
Luego de participar del encuentro con el Presidente Alberto Fernández, Dubin advirtió que “el sistema sanitario está al máximo, está estresado”, y luego precisó: “No puede mejorar más, no es cierto que haya resto”.
La reunión comenzó a las 16:30 y se extendió por casi una hora. Se produjo luego de que este martes la Sociedad Argentina en Terapia Intensiva (SATI) difundiera una carta abierta con críticas al trato que recibe el sector y en la que expresaron el malestar que están viviendo. “No podemos más, nos están dejando solos”, recalcaron los integrantes de la SATI y afirmaron: “Sentimos que estamos perdiendo la batalla”.
Sin embargo, tras la reunión Dubin aclaró: “La tan fustigada cuarentena ha salvado decenas de miles de vida en el país. El aislamiento permitió que la enfermedad se desarrollara lentamente, el sistema sanitario se fortaleció y los pacientes pudieron ser tratados exitosamente. Por eso la mortalidad ha sido tan baja en la Argentina, por eso, incluso teniendo más contagios que el Reino Unido, tenemos decenas de miles de muertos menos. Es un éxito rotundo de la política sanitaria que se implementó en la Argentina”.
Y continuó: “En el AMBA la situación sigue siendo muy grave. Algunos sostienen que estamos en una meseta y que esto nos da tranquilidad. No estamos de acuerdo con eso. Es una meseta con muchos casos. Hay un riesgo cierto de saturación del sistema sanitario. Tenemos una sobrecarga de trabajo enorme. Estamos agotados físicamente, exhaustos en lo psicológico, cometemos errores, nos enfermamos, hay compañeros que han fallecido. Los resultados del funcionamiento de la terapia intensiva no es la misma”.
Dubin también habló sobre los decesos en Argentina en relación con los casos de Covid-19: “La letalidad está aumentando, aún dentro de valores que son mejores que en el resto del mundo. Me preocupa que esto tenga que ver con la saturación creciente de la terapia intensiva”.
Por otra parte aseguró: “El presidente está muy preocupado por la situación, ha manifestado claramente que su objetivo es preservar la vida de los argentinos y nos dio todo su apoyo”.
Finalmente, el médico terapista aseguró que se debe volver al aislamiento y apuntó contra las aperturas: “La terapia intensiva llegó al límite, no damos más. La única posibilidad de evitar un desastre, es bajar el número de contagios y no hay otra herramienta más que el aislamiento. La apertura es una invitación al desmadre”.
En la reunión de también estuvieron presentes la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti; el secretario de Calidad en Salud, Arnaldo Medina, y la directora de Enfermería del Ministerio de Salud, María Donatila Gómez Marquisio.