Entre domingo y lunes hubo 7 muertes en Mendoza, producidas en siniestros viales. Esto elevó la cantidad de decesos en ese contexto a 100 en lo que va del año 2022.
Pese al luctuoso número, lo cierto es que estos 10 primeros meses, que aún no terminan, muestran un escenario mejor al de años anteriores a la pandemia, dado que 2020 y 2021, tuvieron una movilidad reducida y una baja en los siniestros.
El domingo, 5 personas murieron tras un violento choque frontal en la ruta provincial 24, a la altura de Lavalle. El mismo día, en San Rafael, un hombre que conducía una camioneta murió en un choque que se produjo cuando ésta circulaba con cuatro ocupantes por calle Day de Oeste a Este.
El lunes, camino a Vallecitos, en Luján, falleció un hombre oriundo de San Martín que iba en una camioneta, tuvo un vuelco y cayó a un barranco.
La cantidad de muertes en siniestros viales viene a la baja desde 2017 en la provincia, cuando hubo un número alto.
Si se toman años prepandemia, el promedio anual entre 2016 y 2019 es de 158 fallecidos. Al considerar el promedio mensual de muertes provocadas en este tipo de incidentes, puede suponerse que este año terminaría con mejores estadísticas. Entre los años 2016 y 2019 el promedio mensual fue de 13 muertes, aunque hay amplias variaciones entre los diferentes meses. Este año, da 10.
Asimismo, si se toman esos años en cuanto a la cantidad de muertes producidas hasta octubre inclusive (aunque este todavía no termina) se aprecia una brecha. En 2016 fueron 125 pérdidas de vidas, en 2017, 168; en 2018, 145 y en 2019, 117, frente a los 100 acumulados en 2022.
Contexto del descenso
“Comparando con 2019 estamos prácticamente en la misma línea”, afirmó el jefe de la Policía Vial de Mendoza, Fabián Becerra.
Destacó que la provincia ha pasado a ser una de las que tiene menos riesgo en seguridad vial. Efectivamente, en función de los datos que maneja Nación, la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) la ubica en un nivel 3 de 4 en cuanto a la mayor cantidad de víctimas, calificándola como una de las provincias con menor siniestralidad fatal, ya que el nivel 1 contiene aquellas en las que es mayor. Comparte el lugar con Río Negro, Buenos Aires, Santa Cruz, Chubut, CABA y Tierra del Fuego.
De hecho, un informe de esta oficina dio cuenta en julio de que Mendoza es la provincia que más redujo las víctimas fatales en siniestros viales de todo el país, con un 56% de disminución.
Becerra consideró que los siniestros bajan “porque los usuarios de la vía pública están tomando conciencia del respeto por las normas viales y una conducta más responsable”. En ese sentido apuntó que incide mucho que se han implementado más herramientas de control como normas y operativos.
“Se suman diferentes herramientas fundamentales como la Ley de Alcoholemia con una estricta sanción a quienes circulan transgrediendo esta normativa específica,
complemento de la ley 9.024 (ley de Tránsito), y otras normas complementarias, como la exigencia de las revisiones técnicas obligatorias”, señaló.
Agregó que, por otra parte, se han ido sumando políticas de trabajo en la faz operativa que repercuten en la vía pública. En ese sentido mencionó la incorporación de más alcoholímetros y el aporte de los municipios. “Prácticamente los 18 municipios colaboran con la seguridad con su grupo de inspectores, esos operativos en forma conjunta están dando muy buenos resultados”, destacó. Luego añadió: “Al haber más agentes de contralor el usuario acata más las normas”.
Dijo que también cumple un rol esencial la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) que realiza controles en rutas nacionales del corredor bioceánico y rutas internas.
Por qué hay siniestros viales en Mendoza
Sin embargo, hay 100 vidas perdidas este año a lo que hay que sumar a quienes resultan con daños que pueden dejar secuelas y discapacidad. Entre las causas que siguen produciendo estos hechos hay que señalar que el consumo de alcohol sigue siendo de gran impacto. Por otra parte, Becerra refirió que ha aumentado el parque automotor: “Los jóvenes que llegan a la mayoría de edad, buscan tener su licencia de conducir, hay muchos que dicen que necesitan tener la licencia para trabajar como delivery y costear sus estudios”.
Por otra parte, la mitad de los siniestros se producen en rutas, plano en el cual influye mayormente la falta de iluminación y una mayor velocidad en la conducción con más consecuencias en caso de siniestro. Becerra dijo que igualmente se dan casos insólitos o en solitario: “Tenemos fallecidos hasta dentro de fincas, un pozo, un animal que se atravesó, hay incidentes muy insólitos”. Contó por ejemplo que en Rivadavia, un hombre paró solo en su bicicleta y para apoyarse usó el cordón, pero no se apoyó bien, se cayó, golpeó su cabeza y murió.
