El viernes el Gobierno Nacional autorizó el uso de la vacuna china Sinopharm para niños de 3 a 11 años en todo el territorio argentino. Sin embargo, esta noticia tomó por sorpresa a la principal entidad médica del país abocada a la salud de los menores.
La Sociedad Argentina de Pediatría anunció que en las próximas horas publicará un documento para pedirle al Gobierno datos concretos sobre la eficacia del medicamento en los menores de edad.
Quien anunció sobre el uso de las vacunas chinas para esa población fue la ministra de Salud, Carla Vizzotti, quien aseguró que la ANMAT recomendó al Gobierno su aprobación.
Pero, hasta el momento no se mostró la evidencia en la que se basaron para avanzar en ese sentido. En la revista The Lancet Infectious Diseases fueron publicados datos alentadores de inmunogenicidad y seguridad de fase 1 y 2.
El problema, según explicaron los expertos a Clarín, es que para aprobar cualquier medicamento es necesario contar con información de fase 3, tal como ocurrió con las vacunas de Pfizer y Moderna cuando fueron aprobadas para su uso en adolescentes. Lo mismo ocurre con Pfizer ahora que pidió la autorización para que sea utilizada desde los 5 años.
Pero ocurre que con Sinopharm, en cambio, esa documentación no se conoce. Lo único que se sabe es que Emiratos Árabes está realizando el ensayo clínico, pero no está claro que datos recibió hasta el momento la ANMAT para avanzar en la aprobación de la vacuna para ese grupo etario. Pero también se sabe que los países que ya la están aplicando, además de Emiratos Arabes, son China, Bahrein y El Salvador.
“Nosotros estamos de acuerdo con que se vacune a los menores de 12 años, porque eso va a contribuir no sólo a proteger a esa población sino también a que disminuya la circulación del virus. Pero al mismo tiempo queremos saber en qué documentación se basa el Gobierno para autorizar esta vacuna en la población pediátrica”, dijo a Clarín Omar Tabacco, presidente de la Sociedad Argentina de Pediatría.
“Para esto guardábamos las vacunas”, dijo durante el anuncio Carla Vizzotti. Y aseguró que hay alrededor de 10 millones de dosis que serán destinadas a los chicos de 3 a 11 años. Aunque la realidad es que si hoy esas vacunas no fueran aplicadas a la población infantil, habría que ver quiénes más podrían ser los destinatarios.
“Lo más probable es que sea una buena vacuna para los chicos, pero para tener una postura pública y decirles a los pediatras qué recomendar a sus pacientes tenemos que tener más información”, agrego Tabacco.
Por otra parte, el experto dijo incluso que los representantes de la SAP en la Comisión Nacional de Inmunizaciones (Conain) no estaban al tanto de este anuncio.
Por su parte, Roberto Debbag, presidente de la Sociedad Latinoamericana de Infectología Pediátrica, aseguró: “Lo que tenemos que observar ahora es cuántos miembros de la Conain se pronuncian a favor de utilizar la vacuna de Sinopharm en chicos en base a la información disponible”.
Sin embargo, esa reunión, a pesar de que Vizzotti, habló de un acuerdo de la Conain para avanzar con el uso de Sinopharm, no ocurrió. “Son los expertos que tiene el Estado para pronunciarse sobre una decisión de esta naturaleza”, agregó Debbag. Pero, lo que diga la Conain no es vinculante.
El lunes, según adelantó Tabacco, habrá una reunión virtual del Consejo Federal de Salud (Cofesa) en el que seguramente este tema será debatido. “También queremos saber cómo se va a vacunar a los chicos, qué dosis se les va a dar, si se los va a vacunar en las escuelas o en otro lugar”, agregó el presidente de la SAP.