Mendoza ha sido la primera provincia en implementar un Censo de Fluidez Lectora. Se trata de un diagnóstico para conocer cómo leen los estudiantes en primaria y en sus primeros pasos en la secundaria.
En este sentido, en abril se censaron 280.000 alumnos, entre los cuales se observó una evolución sostenida en todos los niveles, pero especialmente hubo una recuperación de una tasa del 10% en los chicos de quinto grado, quienes hace casi un año cuando cursaban 4 grado el 22% arrojaba niveles críticos. Incluso, en aquel momento, el 60% presentaba problemas para leer y escribir.
Esta semana se conocerán los datos completos del desempeño de los lectores en la primera muestra del año, ahora con el foco puesto en tercer, quinto y séptimo grados, junto con el primer año de la secundaria.
La directora de Planificación de la Calidad Educativa de la Dirección General de Escuelas (DGE), Silvina Del Pópolo, adelantó en una charla con Los Andes que los resultados preliminares superaron ampliamente lo proyectado para quinto grado, con una tasa de mejora del 10%. También puntualizó que el avance en la lectura en voz alta se plasmó en todos los niveles.
Qué funcionó
“Esto nos pone en el buen camino y es lo que le corresponde a la escuela. Por eso, desde el Sistema Gestión Educativa Mendoza (GEM), podemos hacer un seguimiento de cada alumno, brindándole propuestas diferenciadas en función de sus trayectorias”, destacó.
De todas maneras, Del Pópolo reconoció que en el punto de partida (en 2021, cuando fue la primera medición) “nos encontramos con muchos chicos que llegaban al secundario sin saber leer”.
A partir de ese muestreo, que se conoció en junio de 2021 (en donde los alumnos de primer año del nivel medio el 32% estaba en nivel crítico, el 63% en el esperado y sólo el 3% por encima de lo esperado) “nos direcciona a entender que no se puede llevar la misma propuesta para todos los alumnos”, analizó la especialista.
Una de las estrategias para mejorar los niveles de la fluidez lectora es la implementación de la extensión de jornada escolar, en la cual los chicos pasan más tiempo en la escuela con actividades para reforzar la lecto-escritura y el aprendizaje de las matemáticas.
“Como llegamos a mejorar, la respuesta es el trabajo sostenido y focalizado para la lectura ágil en los alumnos y en el cual nos comprometemos desde la DGE, desde las escuelas y las familias en lograr un cambio”, dijo la funcionaria.
El propio gobernador Rodolfo Suárez, en la Asamblea Legislativa del 1 de mayo, recalcó la extensión de la jornada con algún formato en el 100% de las escuelas, en el que se afecta a unos 2.000 docentes y directivos de la provincia.
“Escuchar leer a los chicos durante un minuto es parte de lo que queremos medir en lectura, luego nos abocaremos a la comprensión, que es otra de las tantas aristas que podemos relevar en el gran universo de cómo leemos”, destacó. Y agregó: “Hoy encontramos que muchos de ellos tienen dificultades en su vocabulario, porque el lenguaje oral antecede a la lectura”, explicó la funcionaria de la Dirección General de Escuelas.
Una dificultad que se arrastra
Los resultados del Censo de Fluidez Lectora del 2021 y el seguimiento a través del GEM permitieron identificar las escuelas de la provincia, cuyos alumnos tenían una débil trayectoria escolar, y que se visualizó con mayor preocupación en cuarto grado.
Es por eso, que la estrategia será un fortalecimiento desde la salita de 5 años en 100 jardines con una hora más y un programa de funciones ejecutivas de pensamiento básico, memoria y alfabetización.
La directora de Nivel Inicial, Adriana Rubio, trazó un complejo panorama agravado en la pandemia: “Ha habido un retraso muy grande en salita de 4 y 5 años, el aislamiento en la pandemia de Covid-19 les afectó mucho en el lenguaje y en la comunicación, porque esos niños no pudieron ir al maternal. Esta es la etapa más importante para su estimulación, por eso, nos vamos a focalizar en estas trayectorias”.
Rubio volvió a hacer hincapié en ese primer relevamiento de Fluidez Lectora de 2021: “Encontramos que escuelas que aún con baja matrícula, había niños que había pasado por salita de 4, 5 y habían hecho parte de su primaria y seguían con grandes dificultades para la lectura y la escritura, esto nos alertó para apuntar a esos establecimientos y a esas familias para revertir estos datos”.
Otro déficit que se hizo visible en estas instituciones fue el fuerte ausentismo con un 35%, datos también del seguimiento de las trayectorias en 2021.
Por su parte Del Pópolo, también añadió que aquellos con desempeño crítico “les cuesta reconocer palabras, a pesar de que son textos sencillos y específicos para esa edad. Por eso, la apuesta a mejorar su vocabulario en edades más tempranas y al comienzo de su trayectoria escolar”.
Relevar el aprendizaje
Mendoza se prepara para hacer su propia evaluación de aprendizaje focalizada en cuarto grado de primaria y en el segundo de la secundaria en junio, en lo que llamó el gobernador como “el Año de la Alfabetización”.
“Más allá de las diferentes pruebas que tenemos de desempeño escolar, esta nos permite tener un diagnóstico claro de cada alumno y cómo ha sido su trayectoria escolar”, acotó Del Pópolo.
Y señaló que se analizará la comprensión lectora y operaciones matemáticas en 180 escuelas de la provincia.