Un estudio realizado por el Observatorio de Argentinos por la Educación reveló la baja calidad en los aprendizaje en la trayectoria escolar de la primera a la secundaria y arrojó que sólo el 53% de los alumnos argentinos finaliza sus estudios en tiempo y forma, y de este porcentaje nada más que el 16% logra los conocimientos necesarios en lengua y matemáticas.
La investigación se publicó en medio de la iniciativa del Gobierno nacional de extender a una hora más la primaria en todas las provincias del país.
El relevamiento profundizó la situación en todo el país y estableció que hay seis provincias que tienen peores indicadores en la variable “Porcentaje de estudiantes con edad teórica en el último año de secundaria y resultados satisfactorios y avanzados tanto en lengua como en matemática sobre el total de alumnos ingresados en primer grado de la primaria al inicio de la cohorte 2009-2020″. Las que están por debajo de ese 10% de conceptos elementales son: San Juan (8%), Catamarca (7%), Corrientes (7%), Misiones (6%), Chaco (5%), Formosa (5%) y Santiago del Estero (5%).
Mendoza, en ese punto, se ubica por encima de la media, con 19%.
En tanto, en la variable de finalización de los estudios en tiempo y forma se desprende que hay provincias que están en mejores condiciones como: Tierra del Fuego (71%), Ciudad de Buenos Aires (66%), La Rioja (61%) y hay otras por debajo de ese 53%, como es el caso de San Juan (38%), Corrientes (38%) y Misiones (39%). Mendoza se ubica exactamente en la media del 53% en este ítem, siempre según este informe de Argentinos por la Educación.
Los datos, que fueron presentados en el informe “Desgranamiento y aprendizajes desiguales: las dos caras de la misma moneda” surgen del análisis del grupo de chicos que comenzó primer grado en 2009 y llegó al último año de la secundaria en 2020, utilizando los datos del Relevamiento Anual y las pruebas Aprender 2019.
Uno de sus autores, Sergio España, analizó los resultados: “Los datos muestran con claridad dos caras del sistema: no logra que todos los estudiantes terminen la educación obligatoria y no logra los aprendizajes suficientes. Es un sistema en crisis por el conflicto entre dos mandatos sociales: el tradicional, que entiende la escuela media como proceso de selección para la universidad y el mandato actual que pretende que todos tengan un nivel de formación que les permita desempeñarse en la vida”.
Finalmente, del trabajo se desprende otra dramática situación que a partir del noveno año lectivo (segundo año de la secundaria en Capital Federal y tercero para muchas provincias), comienza el abandono paulatino del colegio.