A cuatro años del comienzo de la pandemia y el confinamiento obligatorio por Covid-19, la incidencia y agresividad de la enfermedad ha disminuido notablemente. Gracias a las vacunas y a los avances científicos que permitieron conocer mejor su tratamiento, los números de casos mortales se encuentran muy alejados de los que atemorizaban al mundo.
En este sentido, una prestigiosa revista científica, The Lancet, compartió una investigación internacional en la que relevaron datos sobre cómo cada nación se desempeñó durante la pandemia. En particular, se cerraron en los excesos de mortalidad y en los cambios en la expectativa de vida de cada país con “especial énfasis” en el período 2020 y 2021.
En el estudio quedó constatado que Argentina se posicionó entre los países que mejor gestionó la pandemia y que menor disminución de expectativa de vida tuvo. Los números fueron más bajos que el promedio global, aunque, en el caso de América Latina y el Caribe, la tasa de mortalidad fue casi el doble de este último.
Por un lado, el enfoque del estudio de The Lancet es la “carga mundial de enfermedades, lesiones y factores de riesgo (GBD) 2021, proporciona nuevas estimaciones demográficas para 204 países y territorios y 811 ubicaciones subnacionales adicionales entre 1950 y 2021, con especial énfasis en los cambios en la mortalidad y la esperanza de vida que ocurrieron durante el Período de pandemia de COVID-19 2020-21″”.
En esta línea, argumentaron que el “profundo impacto de la pandemia de COVID-19 en las poblaciones de todo el mundo ha subrayado la necesidad de realizar estimaciones oportunas para comprender este evento sin precedentes en el contexto de las tendencias de salud de la población a largo plazo”.
De estas estimaciones, se desprendió que la pandemia ocasionó en Argentina un exceso de mortalidad del 0,85 cada mil habitantes entre 2020 y 2021. El caso de Uruguay fue el más remarcable, ya que este índice fue de 0,49 muertes cada mil habitantes. El país vecino fue seguido por Costa Rica (0,74), Panamá (0,81) y, en quinto lugar, Chile (1,03).
En lo relativo a la caída en la expectativa de vida, Argentina tuvo un gran desempeño. La medición de este índice relevó una disminución de 76,9 años en 2019 a 76,1 en 2021 (-0,8).
En Uruguay hubo una diferencia de casi el doble: de 77,1 a 75,7 años (-1,4), al igual que en Panamá de 79,9 a 78,3 años (-1,6), y en Chile de 80,6 a 79 años (-1,6).
Costa Rica y Brasil fueron de los países más afectados de América Latina y el Caribe, puesto que la expectativa de vida se desplomó en un de 80,1 a 77,7 años (-2,4) y de 76,4 años en 2019 a 71 en 2021. en el segundo.
Pese a lo mencionado, cabe recordar que la pandemia afectó negativamente, y de formas muy diferentes, a cada país, marcando récords de muertes, contagios e internaciones en todo el mundo. Según la Organización Mundial de la Salud, en el período de 2020-2021 se registraron 14,9 millones de fallecidos.
Por otro lado, el expresidente Alberto Fernández, quien transitaba el inicio de su mandato cuando la pandemia inició, atribuyó que el desempeño de la Argentina fue producto de “un Estado presente”.
“The Lancet destacó el manejo de la pandemia del COVID-19 en la Argentina. Este es el resultado de un Estado presente. Por el bien de la salud de los argentinos esperamos que nuestro país también sea elogiado por la política sanitaria que apliqué durante la epidemia de dengue”, comenzó el exmandatario en la red social X, antes Twitter.
“La acción decisiva y el suministro de más de 135 millones de dosis de vacunas resultaron esenciales para proteger a nuestra población”, concluyó.
