La pelea por la suspensión de las clases presenciales, en el contexto de la pandemia de Covid-19 parece entrar en uno de sus puntos más álgidos. El escenario está planteado entre el Gobierno nacional -que pidió en su decreto la suspensión temporal de la presencialidad- y Mendoza con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), que defienden que sigan asistiendo chicos a las escuelas.
Ayer martes, todos los ministros de las carteras educativas del país se reunieron y votaron por “suspender la presencialidad”. Todos los representantes de las provincias coincidieron en ese voto, excepto José Thomas, de la Dirección General de Escuelas de Mendoza, y el representante del gobierno de Horacio Rodríguez Larreta en CABA.
Mientras un fallo de la Corte Suprema respaldó la autonomía porteña para decidir sobre la continuidad de clases presenciales, aportando más tensiones entre el gobierno nacional y las provincias que sostienen esta modalidad, el gobierno de Alberto Fernández apela ahora a la decisión del Consejo Federal de Educación para que las clases se suspendan.
Lo hizo a través del ministro de Educación de la Nación, Nicolás Trotta, quien dijo esta mañana, al referirse a CABA (aunque esto incluiría también a nuestra provincia) que “Larreta está obligado a cumplir con lo que dice el Consejo Federal de Educación”.
En declaraciones a la web El Destape, Trotta remarcó: “Existió ayer (por el martes) un fallo de la Corte, pero también existió algo en términos del campo educativo muy sustantivo, que es una mirada común de todo el sistema educativo en un país federal”.
Al mismo tiempo, en declaraciones a una radio local, Trotta ratificó que Mendoza debería “acatar la decisión del Consejo Federal de Educación, de todas las provincias. La Ley Federal de Educación dice que es de cumplimiento efectivo”.
Trotta confió que se había comunicado con el gobernador Suárez para transmitirle la decisión y que el mandatario local le adelantó que estaban mejorando los datos de contagios. “El diálogo es el camino”, dijo.
Esta decisión en bloque del Consejo Federal de Educación tuvo en cuenta la categorización realizada por la Nación sobre las zonas con “alarma epidemiológica sanitaria”, donde hay mayor incidencia de contagios de coronavirus. Según esta clasificación, el Gran Mendoza y zonas del Sur provincial entraban en esa categoría, y por tanto debían suspenderse las clases presenciales por 14 días, entre otras medidas. Esa decisión fue comunicada por un decreto de necesidad de urgencia (DNU), expedido la semana pasada por Alberto Fernández, y que generó la posterior “pelea” por sostener la presencialidad de parte de algunas provincias.
Trotta puso el acento en la decisión de CABA también al decir que Larreta debería explicar si ese distrito que el porteño maneja es autónomo o “independiente al resto de los argentinos”, destacando que lo que ocurre en el territorio porteño impacta en toda la Argentina. “Larreta debería explicar si va a seguir incumpliendo los DNU, no solo interpretando los fallos de la Justicia cuando le conviene, porque ahora también está yendo en contra de una norma que según la ley nacional es de cumplimiento obligatorio en todo el territorio argentino, sino también le está dando la espalda a todo el sistema educativo argentino”, insistió el ministro de Educación de la Nación.
En cuanto a qué postura tomará la DGE local ante la decisión del Consejo, por ahora el gobierno escolar de Mendoza no ha salido a dar explicaciones. Este medio consultó a los responsables y por ahora no hay respuestas.
