Una serie de hechos que tienen a cargadores de celulares explotando y generando incendios hogareños instalan una pregunta bastante peculiar: ¿qué tan probable que ocurra un incidente así?
¿EXPLOTA EL CARGADOR DE UN CELULAR?
Partamos de lo lógico y obvio: cualquier dispositivo eléctrico o circuito puede fallar. Es una cuestión que va más allá de los cargadores o celulares particularmente. Se trata de un riesgo normal y que rara vez se convierte en problema.
En el interior del cargador de un celular hay una circuitería capaz de reducir el voltaje de la corriente doméstica transformándolo en corriente continua para que la batería logre retener la carga gracias al proceso químico que se produce en el interior del componente.
La clave en la reducción del voltaje es el transformador, una bobina de cobre que se encuentra en la placa base del cargador. No es el único responsable de la carga del smartphone, ya que también está el circuito de rectificación de entrada, los osciladores y los circuitos de rectificación de salida. En su conjunto no solo reducen el voltaje que sale del enchufe de nuestra casa (de 220 V a una media de 9 V), también adaptan la corriente alterna a continua asegurándose de que se eliminan los picos de voltaje para que la salida sea constante.
Reducir el voltaje y mantenerlo constante es clave para que el celular no padezca la infinidad de cargas que va a tener en su vida útil.
Muchas veces vemos en las redes muchos incidentes relacionados con el cargador o la batería del smartphones, pero pudieron haber sucedido a raíz de alguna falla de la conexión eléctrica, la zapatilla, el enchufe o un daño físico de la batería (por ejemplo, si la batería se golpea o se fabricó mal) o cualquier otra cosa.
En las instalaciones eléctricas de las casas circula cierta cantidad de corriente a tierra en el conductor de protección, que se denomina corriente de fuga. Esta última debe ser mínima. Lo que pasa es que si el aislante está deteriorado, el valor de resistencia será menor y permitiría el flujo de una corriente importante, que podría derivar en un cortocircuito.
De todos modos, es raro que un incendio se desencadene en presencia de estas (inusuales) fallas. Actualmente se exige que las instalaciones eléctricas tengan térmica y disyuntor. Cuando algún aparato está en cortocircuito o hay una subida repentina en la intensidad de la corriente, estos interruptores cortan el circuito eléctrico e interrumpen el flujo de energía.
CÓMO FUNCIONA LA BATERÍA DE UN CELULAR Y POR QUÉ PUEDE EXPLOTAR
Una batería de litio abastece de energía a distintos aparatos tecnológicos, como las computadoras portátiles y los celulares, hasta vehículos como monopatines eléctricos.
Su estructura interna está formada por los siguientes elementos: un cátodo (electrodo negativo) y un ánodo (electrodo positivo). Estos dos componentes están unidos por el electrolito, una sustancia que cierra el circuito y que hace que la batería libere la electricidad poco a poco. La unión de estos tres componentes forma una celda, y cuando se juntan varias celdas se da lugar a la batería de litio.
Como ya se dijo antes: si bien rara vez puede haber un problema con una batería de litio, a veces los sistemas de seguridad son insuficientes o las condiciones ambientales resultan adversas. Si una batería explota casi siempre es por un exceso de temperatura; la carcasa cede porque se vuelve incapaz de aguantar la presión e incendia el electrolito.
CÓMO HACER PARA QUE TU CELULAR NO EXPLOTE
Algunas recomendaciones a tener en cuenta:
- Un fuerte golpe en la batería de litio puede desencadenar la explosión del aparato que la contenga.
- No uses el teléfono mientras se está cargando. Que el móvil explote o se prenda fuego pasa muy rara vez. Lo que sí: cargar y usar al mismo tiempo implica gastar la batería mientras se llena. Le subimos la temperatura y degradamos el aparato.
- Si la batería está caliente, no es conveniente utilizar el aparato, ya que se pueden desprender gases.
- Si el aparato necesita demasiadas horas para ser cargado, es un síntoma de que la batería no funciona bien.
- Se debe respetar siempre el cargador oficial y las especificaciones técnicas de fábrica.
- Las baterías se degradan con el paso del tiempo. La capacidad de carga va disminuyendo de manera progresiva, hasta que se llega al punto en el que el tiempo de recarga pasa a ser mucho más alto que el tiempo en el que se puede utilizar el dispositivo sin estar conectado a la corriente.
- Evitar que el celular siempre esté al 100%. Conviene mantenerlo entre el 20 y 80% de batería.
