La presencialidad de las clases se ha convertido en el gran debate de la actualidad nacional y provincial, en pleno desarrollo de la segunda ola de la pandemia de coronavirus en el país. Mientras que el presidente de la Nación suspendió la presencialidad en las aulas hasta fines de abril en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) e invitó a aquellas jurisdicciones con altos indicadores de contagio y ocupación de camas hospitalarios a que se plieguen a la decisión; la Ciudad Autónoma de Buenos Aires recurrió a la Justicia para que no se interrumpa la presencialidad por decisión del DNU nacional.
En Mendoza, el debate también está instalado. La semana pasada, luego de que un docente con coronavirus falleciera tras permanecer internado; el Sindicato Unido de Trabajadores de la Educación (SUTE) insistió con el pedido de que se suspendan las clases presenciales. E, incluso, convocaron a un paro para el pasado lunes. No obstante, el Gobierno de Mendoza ha decidido -e insistido- en mantener la presencialidad.
Sin embargo, y con la intención de mantener las clases en las aulas; sigue siendo una premisa fundamental reducir la circulación de gente en los edificios escolares. Por ello mismo es que se implementan los protocolos especiales y las burbujas sanitarias (con grupos de alumnos bien diferenciados y separados). En esta sintonía, por medio de una reciente disposición; la Dirección de Educación Superior de la DGE ha recomendado a las autoridades de estos institutos que aquellas materias que sean teóricas y que no precisen de una indispensable presencialidad en las aulas se centren específicamente en la virtualidad; a partir de este martes y hasta el 30 de abril.
“El memo que se ha firmado recomienda la virtualidad en todo lo que tenga que ver con clases teóricas que se reproduzcan dentro de los edificios escolares; y propone la presencialidad física para las prácticas que se dan en espacios formativos”, destacó la directora de Educación Superior de la DGE, Emma Cunietti. Y resaltó que se trata de una recomendación, pero que las autoridades y responsables serán quienes dispongan cómo operar.
Las razones
En ese sentido, Cunnietti diferenció la educación superior de los otros niveles. “Esta recomendación responde a razones pedagógicas, como por ejemplo el hecho de que los adultos que ya terminaron su secundario tienen mayor autonomía en los aprendizajes que el resto del sistema. Entonces, la virtualidad no los perjudica tanto como a un niño menor”, destacó la funcionaria; quien agregó -además- que por lo general los adultos cuentan con sus dispositivos propios para la conectividad.
“También existen necesidades de fortalecer las prácticas en los entonos laborales específicos. Por esto mismo es que la recomendación de la virtualidad es para las clases teóricas, pero mantener la presencialidad en el campo de práctica. Hay carreras como Enología, Enfermería, Montañismo o Técnica de Entrenamiento Deportivo donde el entorno laboral específico son las bodegas, las viñas, el aire libre. Aquí es fundamental mantener la presencialidad, respetando todos los protocolos”, se explayó Cunnietti.
Además, la directora de Enseñanza Superior se detuvo en las razones sanitarias que motivaron esta recomendación. “Entre los institutos público y privados, en Mendoza hay unos 50.000 estudiantes en Educación Superior. Una de las razones sanitarias es, entonces, descomprimir el sobreuso de edificios escolares compartidos (muchos de los institutos funcionan en los mismos edificios donde hay escuelas primarias y secundarias), por lo que se da este sobreuso y se juntan varias personas”, explicó.
En cuanto a otra de las razones sanitarias, Cunnietti resaltó que centralizar la teoría en la virtualidad será clave para reducir la circulación de mayores de 18 años, que -de acuerdo al comportamiento de la pandemia más reciente- es el grupo que mayor contagiosidad genera. “También permitirá reducir la circulación en el horario vespertino, sobre todo si tenemos en cuenta que en muchos institutos están terminando de cursar a las 0:30, y se pisa con las restricciones de circulación dispuestas por la Provincia”. concluyó.