Es frecuente que se produzca confusión entre lo que constituye un feriado nacional y un día no laborable, por lo que es importante aclarar estas diferencias y entender sus implicancias en el ámbito laboral.
Según la Ley de Contrato de Trabajo argentina, un feriado nacional es un día de descanso obligatorio establecido por ley. Estos días están definidos por la Ley 20.744 y la Ley 27.399, que determinan tanto feriados como fines de semana largos.
Durante los feriados nacionales, se debe respetar el descanso dominical, y si un empleado trabaja en esos días, tiene derecho a percibir el doble de su salario habitual por esa jornada laboral.
Por otro lado, un día no laborable es aquel en el cual el empleador tiene la facultad de decidir si se trabaja o no.
A diferencia de los feriados nacionales, durante los días no laborables no existe obligatoriedad de suspender las actividades laborales, y los empleados que trabajen en esos días percibirán un salario normal, sin el adicional correspondiente al feriado trabajado.
La diferencia principal radica en que el feriado nacional es un día de celebración nacional o religiosa, donde generalmente se suspenden las actividades laborales y educativas, mientras que en los días no laborables la decisión de trabajar o no depende del empleador y no se abona un salario extra por trabajar en dicha jornada.
Semana Santa, qué es
Para tener en cuenta, durante la Semana Santa, el 28 de marzo es Jueves Santo, considerado un día no laborable, mientras que el 29 de marzo es Viernes Santo, un feriado nacional. El 1 de abril, que es lunes, ha sido declarado feriado puente con fines turísticos, y el 2 de abril se celebra el Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas, otro feriado nacional.
Es importante tener claras estas distinciones para comprender los derechos laborales y las obligaciones tanto de empleadores como de empleados durante estos días festivos.