Los pasajeros que viajan a casa para Navidad sufrieron este viernes interrupciones en todo el mundo después de que las compañías aéreas cancelaran más de 2000 vuelos ante la falta de personal afectado por el avance de la variante Ómicron de coronavirus, según informó la empresa estadounidense Flight Aware, especializada en proporcionar datos en tiempo real sobre tráfico aéreo.
Hasta el momento, 2.045 vuelos fueron cancelados para la Nochebuena en todo el mundo, de los cuales 457 tenían como destino o punto de partida Estados Unidos, donde la Ómicron representa más del 70% de los casos nuevos.
Además, 4.604 trayectos experimentaron retrasos a nivel global, de los que 509 se dirigían hacia Estados Unidos o partían desde ese país.
Según Flight Aware, las aerolíneas estadounidenses con más retrasos son United, con el 9% de sus vuelos cancelados y el 3% con retrasos, y Delta, que tuvo que anular el 6% de sus itinerarios y el 2% se retrasaron. La mayor parte de las cancelaciones provino de cinco empresas.
China Eastern canceló 474 viajes, Air China eliminó 188, United canceló 180, Air India 160 y Delta canceló 127, según cifras de FlightAware.
“El aumento a nivel nacional en los casos de Ómicron esta semana ha tenido un impacto directo en nuestras tripulaciones de vuelo y las personas que dirigen nuestra operación. Como resultado, lamentablemente hemos tenido que cancelar algunos vuelos y estamos notificando a los clientes afectados antes de que lleguen al aeropuerto “, dijo United, de acuerdo a lo que informó el medio The Guardian.
Mientras tanto, Delta dijo que ha “agotado todas las opciones y recursos, incluido el cambio de ruta y la sustitución de aviones y tripulaciones para cubrir los vuelos programados, antes de cancelar alrededor de 90 vuelos el viernes.
La aerolínea atribuyó el impacto de la variante Ómicron y las condiciones climáticas a las cancelaciones.
Pero detrás de las cancelaciones en Estados Unidos se libra un pulso entre los directivos de las grandes aerolíneas y los sindicatos.
En respuesta al caos previo a las vacaciones, las aerolíneas enviaron ayer una carta a la directora de los Centros de Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), Rochelle Walensky, para pedirle que flexibilice el periodo de aislamiento que deben cumplir las personas vacunadas que hayan estado expuestas al virus de diez a cinco días.
En otro comunicado United afirmó que la variante Ómicron está teniendo un “impacto directo” en las tripulaciones de vuelo y el resto del personal de la compañía.
Ante la presión del grupo Airlines for America, que representa a Delta, United y American, ante los CDC para reducir los tiempos de aislamiento, el sindicato de los auxiliares de vuelo (AFA) envió a Walensky una carta para que se mantengan los diez días pautados.
El pedido de las empresas aéreas se produce además en medio de una relajación de las reglas de autoaislamiento en Inglaterra, lo que permite a las personas poner fin a la cuarentena después de siete días si dan negativo en dos pruebas con 24 horas de diferencia.
De manera similar, los CDC en Estados Unidos redujeron el período de aislamiento a siete días para las personas asintomáticas que dieron negativo en la prueba, pero solo para los trabajadores de la salud.