Agrupaciones ambientalistas y que trabajan en el cuidado y bienestar animal se agruparon esta mañana en la puerta de la Legislatura de Mendoza, aprovechando la conmemoración del Día del Animal, para exigir una ley para “abolir el trabajo esclavo de las mulas porteadoras” en el Parque Provincial Aconcagua.
La iniciativa fue impulsada por la Fundación Cullunche, quien trabaja desde hace ya varios años por el bienestar y la rehabilitación animal. Y, según destacó la presidenta de la ONG Jennifer Ibarra, fueron -al menos- 3 los legisladores que se comprometieron a trabajar en el tema y presentar proyectos para lograr sancionar una ley que prohíba el trabajo de las mulas llevando equipos y otras cargas a los campamentos ubicados en el área protegida ubicada al pie del cerro más alto de América.
“Hace un tiempo pedimos al Ejecutivo que prohibiera el trabajo esclavo de las mulas en el Aconcagua, pero no tuvimos respuesta. Por eso ahora estamos intentando en la Legislatura, para, por través de una ley, lograr abolir el trabajo esclavo de las mulas en el parque Aconcagua”, destacó Ibarra a Los Andes.
Entre las 10 y las 14 de hoy, referentes de Cullunche y otras organizaciones animalistas se reunieron en la Peatonal de Mendoza, a la altura de la Casa de las Leyes, para juntar firmas y pedirle a los legisladores que trabajen en este proyecto.
BASTA DE TRACCIÓN A SANGRE
Entre febrero y marzo de 2023, Cullunche presentó una aberrante denuncia referida al preocupante estado de las mulas en el Parque Provincial Aconcagua. Y es que ONG hizo públicas una serie de fotografías en las que se veía a las mulas de carga del lugar en deplorables condiciones y, según destacaron desde la ONG, quedaba en evidencia el maltrato constante al que eran sometidas por parte de los empleados de las distintas empresas de turismo que operan en la zona.
La denuncia fue presentada ante la por entonces Secretaría de Ambiente y Ordenamiento Territorial, más precisamente ante la Dirección de Recursos Naturales Renovables.
Desde la Secretaría de Ambiente, en tanto. indicaron en aquel momento que ni bien recibieron la denuncia con las crudas imágenes donde se veía a los animales en malas condiciones, iniciaron una minuciosa investigación. Aunque no descartaron tampoco que se tratara de fotos antiguas.
En aquel momento, Cullunche y otros activistas insistieron en la “abolición del trabajo esclavo” de las mulas en el lugar. No obstante, este pedido al Ejecutivo no prosperó. Y por ello mismo fue que hoy, en sintonía con el Día del Animal, el pedido se mudó de poder y se enfocó en el Legislativo.
“Es cierto que existe un Programa de Bienestar Animal de Mulas Cargueras, hoy a cargo del Colegio de Veterinarios. Pero acá el pedido ya no pasa por controlar si están bien o mal las mulas, sino por eliminar el trabajo esclavo en el lugar”, insistió Ibarra.
Entre 2006 y 2017, la Fundación Cullunche fue la responsable del mencionado programa de bienestar, algo de lo que -incluso- hoy la veterinaria se arrepiente, ya que, considera, la solución no tiene que ver con controlar el estado, sino directamente con impedir este trabajo forzoso.
No obstante, a partir de 2018 ese trabajo quedó bajo la órbita de la entonces Secretaría de Ambiente, y desde la dependencia dieron intervención al Colegio de Veterinarios de Mendoza.
El trabajo de este programa consiste en revisar a todas y cada una de las mulas para constatar que estén en buenas condiciones y estado general y de salud. Son más de 100 los arrieros que tienen registradas a sus mulas para trabajar en el Aconcagua (son cerca de 900 animales), y -en temporada- cada mañana, alrededor de las 4, los integrantes del Programa de Bienestar Animal tienen a su cargo la revisión de los ejemplares.
“Ya no es controlar que estén bien, sino exigir la abolición de la esclavitud de las mulas en Aconcagua. Actualmente hay cerca de 900, por eso pedimos una ley para ir sacándolas de a poco del Parque Aconcagua, tal vez de a 300. Y que a los arrieros se los capacite para otras funciones, como podrían ser porteadores.
SIN MULAS, MÁS PORTEADORES
La veterinaria y presidenta de la Fundación Cullunche, Jennifer Ibarra destacó que existen alternativas para suplir a las mulas una vez que se prohíba el trabajo y la tracción a sangre en el lugar, en caso de prosperar el pedido.
“Las principales alternativas son el helicóptero o los porteadores de la APA (Asociación de Porteadores del Aconcagua). Sin el trabajo esclavo de las mulas, habría más fuentes de trabajo para los porteadores, más salida laboral, ya que el traslado de equipos quedaría a cargo de ellos”, resumió Ibarra, quien destacó, además, que en la última temporada se informó de la muerte de 5 mulas en el área protegida.
La contratación del helicóptero -a cargo de cada expedición- implicaría un presupuesto millonario para el periplo para destinar a combustible y gastos operativos. Por ello es que, en caso de que prospere la prohibición del trabajo de las mulas, asoma como una gran oportunidad para los porteadores.
El abogado especializado en derecho animal Oscar Mellado, integrante de la ONG A.so.re.va (Reencuentro por la Vida Animal) también se refirió a la iniciativa e indicó que, en la Legislatura, por iniciativa del diputado Emanuel Fugazzotto, hay un proyecto de ley que busca abolir la tracción a sangre a nivel general y en todo Mendoza (no solo en el Aconcagua).
“No se justifica que estemos cargando a esos animalitos. Que la carga la lleven los andinistas hasta donde puedan, o si no que le paguen el helicóptero, o a los porteadores del lugar”, destacó, en sintonía con Ibarra.
Además, Mellado aprovechó la conmemoración del Día del Animal para insistir en la creación de un Hospital Público Veterinario. “Ya hay hasta un terreno en Corralitos disponible, es clave avanzar con eso”, sintetizó.
Consultados ante la oportunidad y posibilidad de que la ley que prohibiría la tracción a sangre en el Aconcagua -en caso de avanzar y ser sancionada- repercuta en una mayor demanda laboral para los porteadores, desde la Asociaciòn de Porteadores del Aconcagua prefirieron mantenerse al margen y no referirse al tema.