Este miércoles se registraron importantes demoras en el Paso Internacional Cristo Redentor. Una larga fila de colectivos de pasajeros y micros de tour de compras generó malestar y quejas en los usuarios del Corredor Internacional.
El viernes pasado un grupo de personas se enfrentó a personal de la AFIP porque le habrían retenido mercadería a pesar de haber pagado el impuesto aduanero.
La discusión escaló y tuvo que intervenir personal de Gendarmería Nacional. Además, el incidente quedó registrado en un video que horas más tarde se hizo viral.
Frente a esta situación, este miércoles las autoridades de la aduana argentina ordenaron que los vehículos de tours de compras realicen la misma fila que los colectivos de pasajeros.
Debido a la gran cantidad de tours de compran que viajan al país vecino, la fila se alargó mucho más y esto produjo horas de demoras en pasajeros que no había contemplado esta situación. Esto quedó graficado en varios videos que circularon en las redes sociales.
Usuarios que viajan a Chile regularmente por trabajo, personas que tienen vuelos que salen desde Santiago o realizan viajes por turismo terminan siendo las víctimas de un sistema de trabajo que no logra dar respuestas.
“Claramente no alcanzan las evidencias que exponen las más de 12 horas de espera para los colectivos, ni los incidentes con los compradores que se quejan por los controles”, expresó un usuario.
“Ni las colas de los turistas de uno y otro país, ni el pésimo el estado de los baños, la infraestructura, entre tantos reclamos documentados, para que las autoridades de ambos países puedan encontrar un funcionamiento acorde”, agregó.
La respuesta de las autoridades
Este martes, después de una reunión con las “distintas instituciones que trabajan en el complejo Roque Carranza Horcones”, Argentina dispuso un protocolo “para los ómnibus de circuito cerrado o turísticos, mal llamado Tours Compras”.
“Ingresarán de a un ómnibus por vez para ser atendido por los funcionarios. Los pasajeros utilizarán las instalaciones del mismo. Los otros ómnibus deberán esperar afuera y habrá un circuito controlado de sanitarios”, explicaron. Siguiendo el protocolo, los demás deberán esperar a 3 kilómetros, en la zona denominada Pampa de Leña.
“Estas medidas se hacen en función de resguardo de funcionarios y el normal desenvolvimiento de los trámites correspondientes. Teniendo en cuenta que, en el caso de pasar la franquicia de 300 dólares por persona, deberán abonar lo que corresponde si se han excedido”, aclararon.
Además, informaron que Gendarmería Nacional ha reforzado la seguridad y también efectúa patrullaje para evitar descontrol en el Centro de Frontera. “Se pide la colaboración de aduana para la dotación de personal durante las 24″, indicaron.
“También se ha elevado nota a la Comisión Nacional de Regulación del Transporte que notifiquen a las empresas de este tipo de transporte, para choferes, auxiliares y coordinadores sean responsables por la gente que traen en los ómnibus”, agregaron.
Por último, afirmaron que desde la Coordinación Argentina se irán ajustando todos los detalles para una mejor atención.
Una odisea para volver a Argentina
“No existen carriles independientes y atención diferenciada por parte de las autoridades para quienes realizan estas escapadas en búsqueda de ofertas (como sí las hubo del lado chileno cuando a los que le convino el cambio fue a los trasandinos) ni se agiliza demasiado los procedimientos”, manifestó - en una entrevista anterior para Los Andes - un chofer de línea.
“Hay momentos en los que las filas de autos superan los 3 kilómetros, y los buses de compras pueden llegar a sumar más de 25 unidades, con 50 pasajeros cada uno, en los días más críticos. La mayoría sin habilitación para el transporte de pasajeros”, agregó.
Las demoras llegan a alcanzar de 8 hasta 12 horas en la aduana argentina, lo que ha generado malestar entre los viajeros, especialmente los que no realizan “tours de compra”.