Tras el colapso de ida a Chile en la previa de Año Nuevo, las autoridades argentinas del Sistema Integrado Cristo Redentor pusieron en marcha un operativo especial para agilizar el regreso de los turistas en el complejo Roque Carranza (Horcones) a la hora de hacer los controles. En tanto, para cruzar al país vecino, el jueves ya muestra hasta cinco horas de demora en Los Libertadores.
Más de 40.000 argentinos, entre el jueves 26 y el domingo 30 de diciembre, cruzaron a Chile, dejando postales impresionantes: hasta 12 horas de espera, filas de seis kilómetros en plena madrugada hasta Las Cuevas y la apertura de playones en Uspallata y Punta de Vacas para organizar los vehículos en la ruta 7.
Ahora, claro, empieza la vuelta de miles tras brindar y festejar la llegada del 2025 en Viña del Mar y Reñaca.
Para evitar inconvenientes, desde Horcones habilitaron este jueves las ocho cabinas disponibles para la atención (todas para particulares) y aplicaron controles selectivos, uno cada 25 vehículos de manera aleatoria. La promesa es hacer el regreso más expedito, al igual que a la hora de revisar los colectivos, muchos que vienen de cumplir los famosos tours de compras.
Por otra parte, la Policía mantiene los controles en la ruta internacional en localidades como Las Cuevas, Punta de Vacas, Uspallata y Potrerillos.
Ya hay cinco horas de demora rumbo a Chile
El complejo chileno Los Libertadores amaneció este jueves, primer día hábil del año, con unas tres horas de espera, a contar desde el ingreso hasta el túnel.
Según indicaron desde Gendarmería Nacional, Chile habilitó en la madrugada apenas cinco cabinas, tres de ellas en el patio mixto, retrasando los trámites para los vehículos y ocupantes.
Lamentablemente, a las 10, desde Chile confirmaron hasta 5 horas de demora, por lo que habrá que retomar la paciencia.
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