Durante las últimas décadas, el crecimiento urbano del Gran Mendoza se dio en un contexto prácticamente caótico. Ya sea hacia el piedemonte (donde hay, al menos, 10.000 familias viviendo en zonas de cauces aluvionales -aquellas que viven en situaciones precarias son las menos-) o hacia el cinturón productivo, la densidad demográfica se fue extendiendo como una mancha de aceite en un mantel.
Ya con la Ley provincial de Ordenamiento Territorial y los planes municipales, cada departamento ha intentado en los últimos años acomodar esta situación. Y en la Ciudad de Mendoza, el concepto de “Ciudad compacta” es el que ha tomado un fuerte protagonismo. Por esto mismo es que el flamante Plan de Reactivación Urbana de esta comuna apunta a recuperar y renovar espacios grises (o “pasivos urbanos”, como los denominó el intendente Ulpiano Suárez) en aquellos sectores que ya cuentan con una importante densidad poblacional. Se trata de aquellos predios en los que hay baldíos, casas de adobe o playas; por ejemplo.
Y en ese sentido, son las Secciones Uno, Tres y Cuatro las que cuentan con mayor presencia de estos espacios que pueden renovarse o reciclarse. Por esto mismo, dentro del plan de incentivo para aquellos emprendimientos que se instalen desde cero en Capital (inmobiliarios y comerciales) y que prevé eximición de entre 50% y 100% de las tasas y aforos; quienes mayores beneficios encontrarán serán quienes elijan hacerlo en los sectores ya detallados
“Vamos a modificar la ordenanza de Gestión de suelo, por lo que el crecimiento de la Ciudad, el cómo y dónde construir se basará en el Plan de Ordenamiento Territorial. Además, habrá incentivos fiscales para quienes construyan, se priorizará la sustentabilidad urbana, la modernización del Estado y el mejoramiento de la infraestructura”, destacó el intendente capitalino; quien resaltó que los beneficios para los desarrolladores ya están vigentes y se extenderán hasta el 30 de junio del año próximo.
“Tenemos que generar desde ahora la reactivación económica, y a eso apunta este plan; a la generación de empleo. Y estamos convencidos de que es el sector privado el que lo genera”, insistió Suárez.
Las zonas a reactivar
La Primera, la Tercera y la Cuarta Sección son las zonas identificadas con mayor cantidad de “pasivos urbanos”. Según los datos recabados por el municipio; 25,6% de los espacios censados tienen estas características y podrían ser “reciclados” con flamantes construcciones. Dentro de los distintos tipos de pasivos, son las casas de adobe la mayoría (43,5%).
En términos generales y tomando en consideración todo el territorio capitalino -aquel en el que está permitida el avance de la construcción-; aquellos privados que desarrollen emprendimientos inmobiliarios desde cero obtendrán como beneficio una exención de 50% en el aforo de construcción. Se trata de una especie de derecho de obra que se debe abonar para iniciar, y quienes planifiquen y den inicio a sus proyectos en toda la Ciudad podrán hacer uso de este incentivo al momento de encarar otra obra planificada. Pero si, además, se trata de una propuesta con más de cuatro unidades habitacionales, la eximición del aforo para otro proyecto será total (100%).
El detalle -y con el que se busca aprovechar y potenciar la Primera, la Tercera y la Cuarta Sección- es que si estos emprendimientos están planificados en estas áreas; los emprendedores se verán beneficiados también con otro 50% de exención en el aforo de construcción y, en este casi, podrán aplicarlo a la primera obra.
Los beneficios también alcanzan a las tasas municipales, ya sean inmobiliarias o comerciales. Quienes construyan en todo el departamento -en genera- tendrán una exención de 50% en el pago de estos servicios durante un año, contando desde la finalización de la obra. En los proyectos de más de cuatro viviendas, el incentivo se extenderá durante dos años.
Pero si la obra está situada en las tres secciones ya detalladas, esa exención de pago de la mitad de las tasas se extenderá durante dos años. Y si es de cuatro unidades habitacionales el emprendimiento, la eximición de tasas inmobiliarias o comerciales llegará a 100% durante dos años.
Impulso a la construcción sustentable
Otro de los pilares del plan apunta a fortalecer la construcción sustentable, que genere el menor impacto ambiental en el ecosistema urbano. Por esto mismo, la propuesta presentada ayer incluye también eximiciones en tasas para los desarrolladores que construyan siguiendo los estándares mínimos de construcción sustentable (en lo referido a iluminación, aclimatación y gestión de residuos).
Para estos proyectos, rige un beneficio de no cobro de hasta 100% de las tasas y de acuerdo al nivel de sustentabilidad. Y lo positivo es que se aplicará tanto en construcciones nuevas como en remodelaciones de viviendas ya existentes. “Estos beneficios serán acumulables con los ya detallados por obras nuevas, y de acuerdo a la zona”, agregó el intendente.
En números
Para ejemplificar en un caso concreto, el intendente de Ciudad se detuvo en un emprendimiento inmobiliario que ya está en marcha; y comparó los costos, beneficios y plazos que está demandando siguiendo su curso actual con los que tendría adaptándose al nuevo plan.
“Tenemos un proyecto de viviendas familiares autosustentable en ejecución. Tiene 20 departamentos, cinco locales comerciales y genera 50 puestos de trabajo directo y otros 100 de manera indirecta. Ha demandado una inversión de 220 millones de pesos, y actualmente tiene que esperar nueve meses para que se apruebe la obra (literalmente, un parto). Con el nuevo plan de reactivación, ese desarrollo va a tener una eximición de 500.000 pesos en tasas; además de un crédito urbano para poder usar en otra obra”, destacó el intendente.
Además, resaltó que la propuesta incluye una modernización administrativa, por lo que la meca es reducir los nueve meses de demora de autorización a cuatro.
El piedemonte ya no será un “basural a cielo abierto”
Luego de la declaración de la emergencia climática en la Ciudad de Mendoza -oficializada en enero de este año-, la Municipalidad de la Ciudad comenzó a trabajar en la zona del piedemonte de su jurisdicción. En ese momento, habían detectado más de 200 casas a relocalizar, puesto que se encontraban en zonas de riesgo aluvional; y comenzaron a trabajar con las familias de la zona de La Favorita.
En ese sentido, ya está licitada la quinta etapa del plan integral de urbanización del lugar, para el que se destinarán más de 514 millones de pesos y beneficiará a más de 5.000 personas. “El objetivo es que en no más de dos años, estas personas ya tengan acceso a los servicios básicos”, resaltó el intendente de Ciudad, Ulpiano Suárez.
Además, como innovación, Suárez anunció que creará un registro de empresas de contenedores de residuos. “No queremos que el piedemonte se convierta en un basural a cielo abierto. Por esto mismo es que a las empresas que se encarguen de la recolección de escombros se les va a exigir un certificado de deposición que certifique el destino final de los escombros”, concluyó Suárez.