En Mendoza hace más de una década que no se presentan casos de rabia, una enfermedad viral que afecta al sistema nervioso. Si se consideran casos humanos es mucho más: hace 40 años del último notificado, en 1982.
Son los datos que manejan en el Departamento Provincial de Enfermedades zoonóticas y vectoriales.
“Tenemos buena cobertura de vacunación”, sostuvo Ernesto Ueltschi, médico veterinario del área, al destacar que esa es la causa de que se mantenga controlada. Pero justamente por ello subrayó que es fundamental que se mantenga así y por eso se hacen campañas permanentes.
“La vacunación de nuestras mascotas es la única forma de cortar el ciclo (...) en varias provincias y en Mendoza, tenemos un mix para hacerlo en las veterinarias privadas y en los municipios”, resaltó el profesional.
Estos últimos suelen organizar campañas específicamente de vacunación antirrábica gratuita o junto a una estrategia más amplia como puede ser desparasitación y tratamiento de sarna.
Hoy es el Día Mundial de la Lucha contra la Rabia y en este marco se busca la toma de conciencia y generar acciones. Por ello es recomendable consultar en páginas y otros canales de las comunas para saber cómo acceder.
Cómo es la rabia
Los afectados por este virus son mamíferos, lo que incluye a los seres humanos. En este punto hay que destacar lo que advierte el Ministerio de Salud de la Nación: en la gran mayoría de los casos presenta un desenlace fatal.
“Es una enfermedad prevenible a través de la vacunación, tanto en animales como en humanos. En nuestro país los perros y los gatos son los principales transmisores de rabia pero también pueden serlo algunos animales silvestres como los murciélagos”, resalta. En cuanto a la transmisión explica que el virus, presente en el animal infectado, se puede transmitir a través de la herida causada por una mordedura, o bien cuando el animal lame una parte del cuerpo de la persona lastimada recientemente.
En Argentina los transmisores de rabia son, principalmente, los perros y los gatos, pero también algunos animales silvestres, como los murciélagos y los zorros, señalaron desde el Ministerio de Salud de Mendoza. Además, las vacas y los caballos pueden tener la enfermedad pero, en general, no agreden.
El virus se localiza en la saliva del animal infectado, que lo transmite mordiendo o lamiendo una zona lesionada del cuerpo de otro animal o de una persona.
“Es fundamental vacunar obligatoriamente a perros y gatos a partir de los 3 meses de edad y vacunarlos anualmente”, subrayaron.
“Los murciélagos también pueden transmitir rabia, aunque obviamente no todos tienen, por lo cual si ven algún murciélago con conducta alterada que anda de día o se choca las paredes, que esté en un patio o un gato jugando con él, que no lo toque nadie y llamen a zoonosis”, alertó Ueltschi.
En cuanto a la vacunación en personas, explicó que existe una vacuna pre- exposición, que se aplica a personal expuesto a un posible evento de rabia, pero dado que se está libre de la enfermedad, no se hace vacunación masiva. Ante una mordida se evalúa el riesgo y se considera el posible tratamiento.
Cómo actuar ante el riesgo de rabia
“Una vez que aparecen los síntomas clínicos, la rabia es prácticamente 100 % mortal. Es por eso que, en caso de que una persona haya estado expuesta, por mordedura, arañazo, lamedura u otro contacto de este tipo con un animal sospechoso de padecer rabia es necesario tratar inmediatamente la herida y acudir al profesional de la salud”, resalta en un informe el Laboratorio Boehringer Ingelheim.
Luego explica que el tratamiento de profilaxis postexposición en las personas consiste en:
- lavar y limpiar de inmediato la herida durante un mínimo de 15 minutos con agua y jabón o detergente,
- aplicar sustancias que matan el virus de la rabia como alcohol/etanol al 70% o povidona yodada,
- acudir inmediatamente al profesional de la salud quien decidirá si corresponde aplicar otras medidas como vacunación y administración de inmunoglobulina antirrábica.
A su vez, un médico veterinario deberá implementar el seguimiento del animal en cuestión. Se lo debe observar durante 10 días. Si en el transcurso de 10 días, el animal muere o exhibe signos clínicos de la enfermedad, la persona mordida deberá concurrir en forma urgente a un hospital para comenzar el tratamiento antirrábico.
“A pesar de que la rabia es prevenible mediante la vacunación, alrededor de 59.000 personas mueren al año en el mundo a causa de la enfermedad. Está presente en todos los continentes, inclusive en Sudamérica. Los perros son la principal causa de muerte en humanos. Por ende, la vacunación de los perros es la forma más eficiente de proteger a las personas frente a esta enfermedad mortal”, explican.
Por ello destacan la importancia y su apoyo a la estrategia #RabiaCeroParael30 (#Zeroby30), que plantea reducir a cero las muertes humanas por rabia transmitida por perros para 2030.
¿Cómo se previene la rabia?
-Si se encuentra un murciélago, lo aconsejable es no tocarlo. Avisar al centro de zoonosis de su municipio para que sea un técnico quien lo retire y lo envíe al laboratorio para su análisis.
-En caso de sufrir una mordedura de un animal, lavar la herida con abundante agua y jabón, no colocar alcohol ni otro desinfectante, y concurrir rápidamente al centro de salud más cercano para ser evaluado por un médico.
-Cuando esté indicado, debe aplicarse la vacuna antirrábica humana lo más inmediatamente posible después de ocurrida la exposición.
-Vacunar a los perros y gatos contra la rabia, desde los 3 meses de edad y una vez por año durante toda su vida.
¿Cuáles son sus síntomas de la rabia?
En las personas los síntomas que deben hacer sospechar el diagnóstico de rabia son fiebre, inquietud, dificultad para tragar, dolor de cabeza, sensación de hormigueo en el sitio de mordedura o lamedura, días después de haber sido agredido por un animal.
En los perros y gatos los síntomas incluyen cambios de comportamiento, agresividad, salivación excesiva, imposibilidad de tragar o de beber, pupilas dilatadas, convulsiones, parálisis y muerte.