El jueves, Santiago Cafiero, jefe de Gabinete nacional, sorprendió a más de uno al señalar que todos los distritos tienen libertad para negociar por su cuenta la adquisición de más dosis de vacunas.
Las autoridades mendocinas fueron parte de los sorprendidos y por ello ya pusieron manos a la obra y estudian qué opciones tienen para lograr acceder a tan preciado bien cuando ya se inició la segunda ola de la pandemia. Es que hasta ahora, la compra estaba centralizada por la Nación y por haber quedado en desventaja, en tiempo y número, evalúan como gestionar en bloque con otras provincias.
Desde el Gobierno anticipan que será un desafío: “Es muy difícil comprar vacunas, casi imposible”, aseguró una alta fuente de la Gobernación y recordó que hay Estados nacionales a los que los laboratorios no les están vendiendo por lo que creen que a los provinciales les resultará mucho más complejo acceder.
En ese sentido se manifestó el jueves el gobernador Rodolfo Suárez, quien dijo que a esta altura, cuando ya los gobiernos se han asegurado dosis, las chances son escasas. Y para los desmemoriados trajo a colación que el gobierno nacional dijo al inicio de la pandemia que iba a centralizar la política de insumos y recordó la intención trunca de su gestión de comparar respiradores y que Nación no habilitó.
“Hoy el discurso ha cambiado y es como poner la pelota en la cancha del otro (...) a las provincias les resulta muy difícil poder acceder a un mercado escaso de vacunas y el poder de negociación no es el mismo que tiene una Nación”, subrayó.
“Estamos buscando todos los vínculos posibles con empresarios, científicos mendocinos que tienen relaciones con el mundo, yo personalmente los estoy llamando para ver cómo pueden vincularnos con alguien”, dijo el mandatario.
Entre las estrategias consideran una buena posibilidad asociarse con otras provincias con capacidad de compra para unir fuerzas y recursos. Una en la que piensan es San Juan pero creen que podrían reunirse 3 o 4 jurisdicciones.
Es que no sólo se trata de tener poder de negociación sino que además saben que en una compra menor los costos serían mayores, por ello, uniendo voluntades podrían lograr mejores precios e incluso financiación.
Por el momento, Suárez le ha encomendado al ministro de Hacienda y Finanzas, Lisandro Nieri, avanzar en la cruzada. Aseguran que de lograrse Mendoza tendría los fondos pero necesitará que el Banco Central le autorice los dólares necesarios.
Quien también está tanteando el terreno es el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta. Junto a su equipo están iniciando contactos informales con algunos laboratorios. Así lo informó ayer el jefe de Gabinete de la Ciudad de Buenos Aires, Felipe Miguel, quien pese a reconocer que será difícil tiene expectativas: si consiguen, apuntan a proveer no sólo a la Capital Federal sino también a otras jurisdicciones.
Cuesta arriba
La escasez de vacunas no es ninguna novedad. Cuando comenzaron los desarrollos los países se apuraron a hacer acuerdos y “los más pudientes” lograron asegurarse una buena proporción de ellas, incluso antes de su fabricación. Esto se sumó a la demanda alta y concentrada por lo que en general los laboratorios han incumplido las promesas.
Pese a los discursos políticamente correctos, el mundo no pudo evitar mostrar su verdadera cara y los países pobres corren con desventaja.
“El 90% de las dosis de las vacunas contra Covid-19 está en un 10 % de los países”, afirmó la ministra de Salud de la Nación Carla Vizzotti, haciéndose eco de la información que circuló a mediados de marzo.
En ese marco, la realidad contrasta con los anuncios rimbombantes del presidente Alberto Fernández, de diciembre y enero, sobre los millones de dosis que recibiría el país. Llegó una pequeña parte y los cuestionamientos no tardaron en llegar mientras, con una escalada de casos, el virus pisa los talones en el inicio de la segunda ola.
Así las cosas, el tema de la vacunación es una papa caliente que nadie termina de tomar. “El Gobierno nacional al hacer esto le tira la pelota a los estados provinciales para compartir el fracaso”, comentan en el Gobierno. “Vamos a agotar todas las instancias, vamos a preguntar en todas partes, ante la escasez se busca lo que se encuentra”, dijo un referente. “Por el momento hemos podido sondear que algunos estados nacionales han hecho ya los depósitos, quizás la opción es que la provincia también haga un depósito y con suerte tener vacunas en 7 meses”, conjeturó Suárez.
AstraZeneca
Se seguirá usando la vacuna en la provincia
Mendoza no impondrá reparos y seguirá usando la vacuna de AstraZeneca. “Todas las recomendaciones siguen siendo las mismas: el beneficio supera ampliamente riesgo de enfermedad tromboembólica por lo que obviamente se va a seguir utilizando la vacuna”, dijo Iris Aguilar, directora de inmunizaciones de la provincia. Luego explicó, debido a que estaba a la generación de cuadros de trombosis. La OMS también descartó riesgos.
