Si bien es algo desaconsejado y que implica incontables riesgos en cualquier parte del mundo, en Argentina, solamente Mendoza es la única provincia que prohíbe por ley manejar vehículos con ojotas o sandalias abiertas.
No solo ello sino que, además, la propia Ley de Tránsito provincial 9.024 establece multas económicas para quienes sean detectados in fraganti conduciendo con este tipo de calzado no permitido ni adecuado. Al tratarse de una falta leve -según su categorización-, y de acuerdo a los valores actualizados a noviembre de 2024, la multa asciende a 12.700 pesos.
En caso de concurso -se llama así a una situación en la que se suman varias infracciones y, en consecuencia, se acumulan las sanciones-, el acta económica podría ser más alta aún. Considerando que las faltas gravísimas implican multas de 127.000 pesos, el concurso puede acumular 190.500 pesos.
Conducir alcoholizado -con más de la graduación de alcohol permitida por litro de sangre- es una infracción que se encuentra tipificada como falta gravísima, aunque el valor de las multas está por fuera de las categorías del resto de las faltas. Y la multa por control de alcoholemia positivo va desde los 381.000 pesos hasta 1.397.000 pesos, según la graduación alcohólica.
CON QUÉ CALZADO NO ESTÁ PERMITIDO CONDUCIR VEHÍCULOS
Conducir con ojotas, chancletas o sandalias abiertas (ya sean de tipo crocs o no) está penado por la ley en Mendoza. Se trata de una falta leve (100 unidades fiscales), por lo que el acta es de 12.700 pesos, aunque abonando en los 3 días posteriores se aplica un descuento y el castigo económico queda en 7.620 pesos, siempre de acuerdo a los valores actualizados a noviembre de 2024.
La Ley Nacional de Tránsito no contempla esta prohibición ni sanción, e -incluso- Mendoza es la única jurisdicción de Argentina donde está prohibido. De esta manera, cualquier conductor que transite en territorio mendocino tiene prohibido hacerlo con este tipo de calzado y queda expuesto a la sanción en caso de ser detectado, independientemente de si viva o no en la provincia.
Reglamentada en 2018, la Ley 9.024 (de Tránsito de Mendoza) obliga a los conductores a “usar calzado apropiado, apto para el manejo y control de los pedales”. En el mismo articulado se aclara que ese calzado “debe ser cerrado y de suela antideslizante”.
“Solo se permite calzado abierto si ajusta todo el pie”, se aclara. Es decir, se puede conducir con sandalias siempre y cuando tengan tiras o cierres a la altura del talón y que mantengan cubierto y envuelto a todo el pie.
Si hay que hablar del riesgo al momento de conducir, en caso de que el calzado sea cerrado y esté correctamente sujeto a los pies y sin hacer juego, eso le permitirá al conductor acelerar y frenar con mayor precisión y rapidez.
Por el contrario, si el calzado es abierto -ojota, chinela o sandalia-, esta situación derivará en que el conductor pierda la sensibilidad ideal con los pedales. Y una presión extra con el pie podría generar maniobras bruscas y peligrosas.
A ello se suma el peligro inminente de enredo o traba con los pedales para las ojotas u otros calzados abiertos.
POCAS MULTAS POR CONDUCIR CON OJOTAS O SANDALIAS ABIERTAS
Desde el Ministerio de Seguridad de Mendoza destacaron que no son significativas la cantidad de actas labradas por conducir con calzado inadecuado. De hecho, resaltaron que las faltas leves más frecuentes detectadas en los operativos de la Policía Vial son ir con las luces bajas apagadas, circular sin RTO y estacionar en sitios no permitidos. Ya se han aplicado 61.051 multas por faltas leves en lo que va del 2024 (en todo 2023 fueron solo 49.901).
Las faltas graves más comunes identificadas en lo que va del año son giros en “U”, adelantamiento por la derecha y cargas que sobresalen de los limites. En todo 2023 se labraron 2.010 actas por faltas graves, mientras que a noviembre de este año ya se contabilizan 2.005.
Respecto a las gravísimas, las más comunes este año vienen siendo circular bajo los efectos del alcohol, circular sin cinturón de seguridad colocado o hacerlo sin licencia de conducir. Aquí también hubo un incremento comparado con el año pasado, ya que en todo 2023 se labraron 13.161 actas, mientras que hasta noviembre de 2024 ya se han labrado 13.385.
SE CUADRIPLICARON LAS MULTAS POR FALTA DE RTO EN MENOS DE UN AÑO
En octubre, Los Andes difundió el dato de que ya se habían labrado más de 20.000 actas por circular sin la RTO o con la oblea de RTO vencida. De hecho, al analizar la cantidad de multas en general aplicadas en lo que va de 2024 -a un mes y medio de su cierre-, ya hay 14% más de actas que en todo el 2023.
El detalle es que las actas por no circular con RTO en lo que va de este año se multiplicaron más de cuatro veces comparadas con todas las aplicadas el año pasado. En 2023 se labraron 5.511, mientras que en menos de 11 meses de 2024 ya son 23.301 las multas.