Justo en una semana de altas temperaturas y ola de calor, Mendoza, al igual que gran parte del territorio argentino, está en alerta violeta respecto al índice solar UV. Esto pone en riesgo a la población si es que se expone al Sol durante mucho tiempo -varía según la hora y el tipo de piel- sin respetar los cuidados básicos, como es el uso de protector solar.
¿Qué es el índice solar ultravioleta y cómo se mide?
Se trata de una medición realizada por el Servicio Meteorológico Nacional y actualizada constantemente. La radiación solar ultravioleta que llega a la superficie de nuestro planeta comprende el rango de longitudes de onda UVB (280-320 nm) y UVA (320-400 nm). En este índice se considera la radiación solar UV eritérmica que está relacionada con el enrojecimiento de la piel.
Para organizar los datos, el SMN desarrolla dos mapas: uno del pronóstico del índice solar ultravioleta (ISUV) correspondiente al mediodía (punto más alto del Sol sobre el horizonte, a las 13) y otro con el pronóstico del índice ultravioleta incluyendo el paso de la nubosidad pronosticada (ISUVn).
El nivel de riesgo para los seres humanos varía según el tiempo de exposición, aunque depende del tipo de piel.
¿Qué significa el alerta violeta?
Actualmente, casi todo el país está en esa categoría identificada con el tono violeta. Esto significa nivel de riesgo “extremo”. De verse más claro en el mapa, el peligro crece.
Para informar a la ciudadanía, el SMN se guía por dos tablas. En una se tienen en cuenta los tipos de piel en el rango más sensible entre tipo I (céltica) y tipo IV (mediterránea). Se trata de una clasificación de Fitzpatrick (1988). Como se sabe, para piel más clara, el riesgo es mayor. Mientras que la tipo IV es más resistente.
A eso hay que sumar el tiempo en minutos que la persona pasará expuesta al Sol.
¿Cómo sé qué tipo de piel tengo?
El SMN también agrega una tabla con los colores de piel. Céltica, pálida, caucásica y mediterránea son los cuatro tipos predominantes en Argentina. Cada una tiene sintomatología diferente al pasar demasiado tiempo bajo el Sol.
¿Cuánto cuesta un protector solar?
La mayoría de las marcas que venden potes de 200 ml exhiben valores que inician entre $600 y $1.500 (tomando en cuenta el factor de protección solar 30 o más, recomendado por el Ministerio de Salud de la Nación), aunque los precios pueden superar ampliamente los $4.000, en algunos casos.
En una conocida cadena de farmacias, se puede conseguir un protector solar (250 ml) factor 50 con vitamina E a $694,40, aunque uno para bebés factor 60 salta a $753. De optar por spray o lociones post solares, los valores ascienden hasta los $1.700.
De acuerdo con el Ministerio de Salud de la Nación, la exposición a las radiaciones ultravioletas provenientes del sol es la causa más frecuente del cáncer de piel. Por esta razón, es importante protegerse del sol durante todo el año, no solo durante el verano.
Los horarios de 10 a 16 están prácticamente prohibidos para exponerse. Y en el caso de los bebés menores de 1 año se debe evitar completamente la exposición.
¿Qué pasó con el proyecto de ley?
Si bien muchas obras sociales ofrecen descuentos a sus afiliados para adquirir cremas y lociones, los protectores no están asegurados de manera gratuita a toda la población.
Desde el año pasado hay un proyecto de ley en la Cámara de Diputados de la Nación para que obras sociales y prepagas incorporen como “prestación obligatoria la cobertura de protectores solares con factor 30 (FPS 30) o superior, indicado a través de prescripción médica, de acuerdo al criterio del especialista que prescriba el producto necesario para proteger cada tipo de piel”.
Sin embargo, la iniciativa, presentada por el diputado bonaerense Fabio Quetglas (Juntos por el cambio), aún está “cajoneada” y no avanzó desde la comisión de salud, por lo que su debate en tablas está en espera.