Médicos locales participan de un proyecto internacional que apunta a mejorar la atención emergentología en efectores regionales. En Mendoza, profesionales del hospital Saporiti de Rivadavia reciben capacitación a través del proyecto ECHO que surgió en Nuevo México, Estados Unidos y se desarrolla en diversos países del mundo.
“Lo que tiene de interesante es que se da en el marco de un proyecto mundial, que ayuda a incorporar de forma gratuita conocimientos y formación a médicos de hospitales regionales o que estén alejados de los centros de referencia”, detalló el doctor Gonzalo Pagella, uno de los coordinadores locales, médico especialista en Terapia Intensiva y magíster en Cuidados Críticos. Explicó que se hace a través de una plataforma virtual y hoy tiene cursos en todo el mundo. También son parte del equipo los doctores Federico Galiotti y Hugo Pagella, vicedecano de la Universidad de Mendoza y Director de Carrera Facultad de Ciencias Médicas.
A nivel local, el centro de intermediario es la facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de Mendoza.
El proyecto ECHO nació en el Instituto ECHO, en Albuquerque, Nuevo México, constituye un modelo internacional que impacta directamente en campos como la salud, la educación y la justicia social y se ha replicado en Asia, América, Oceanía, Europa y África.
Esta instancia se realiza a modo de prueba piloto y la intención es luego hacerlo extensivo a otros efectores, incluso centros de salud.
La posibilidad que abren es la de dar una mejor respuesta a la comunidad. Es que por un lado pueden recibir formación por parte de expertos, de hecho, quienes se encargan de la capacitación han sido formados específicamente en el marco del proyecto. Pero por otra parte, abre la posibilidad de estar conectados con los especialistas para realizar consultas virtuales ante alguna necesidad de un paciente que se esté atendiendo. De este modo, puede darse una mejor atención sin necesidad de que la gente haga traslados a distancia hacia centros donde se encuentren los especialistas.
“Este curso ECHO empezó hace tres jueves y durará 7 jueves en total, casi dos meses -explicó Pagella- la particularidad que tiene esta propuesta es que puede dársele la extensión que se desee porque como es a partir de la presentación de casos clínicos a medida que surgen las inquietudes uno puede seguir generando ECHOS; de hecho, hay ECHOS en el mundo que ya llevan 7 años, cada 15 días se juntaban discutir casos clínicos con diferentes expertos”.
Pueden proponerse diversos temas de abordaje y se interactúa con especialistas en ellos. “La idea es que a través de expertos que sepan sobre una problemática se pueda expandir el conocimiento a lugares alejados de los centros más importantes, en este caso de medicina, entonces a través de esta plataforma hay una retroalimentación entre el participante y el experto”, refirió.
Beneficios del proyecto ECHO
Esta teleEcho apunta a lograr una mejora en la atención de patologías prevalentes en el servicio de emergencias, permitiendo realizar una atención adecuada, oportuna y efectiva. Permite adquirir herramientas para reconocer la gravedad de los distintos cuadros, ya que el abordaje en el tiempo adecuado, la decisión de derivación a un centro de mayor complejidad y la realización de medidas terapéuticas acorde a la gravedad tienen un impacto directo sobre la evolución y la sobrevida de los pacientes
Pagella explicó que el beneficio más importante es para los pacientes, “porque no van a necesitar ir al especialista y trasladarse, en este caso de Rivadavia al hospital Central o a una guardia que esté más capacitada sino que van a a poder recibir toda la atención adecuada en los centros regionales que o sean centros de referencia”.
En definitiva, el médico puede recibir la experiencia de expertos de manera virtual, sin necesidad de trasladarse y que eso se transfiera a la comunidad.
“Por otro lado, es todo absolutamente gratuito, la universidad no cobra nada, el proyecto tampoco por ofrecer plataforma y soporte y los expertos y quienes estamos a cargo no recibimos ninguna retribución económica, por lo que no se paga nada para recibirlo”, subrayó el profesional.