Supermercados e hipermercados varios municipios del cornurbano bonaerense no podrán vender productos no esenciales hasta el 17 de julio.
Se trata de las comunas de Lanús, Tres de Febrero, Hurlingham, La Matanza, Merlo y Morón, las cuales a través de un comunicado informaron a los comerciantes que la venta de dichos productos quedaba prohibida.
Según informó La Nación, las autoridades les pidieron a los comerciantes que limiten el acceso a las góndolas de productos no esenciales, como ropa y electrodomésticos, entre otros elementos.
No obstante, podrán seguir vendiendo estos ítems vía ecommerce, es decir, de manera online pero no en los locales.
La idea es “evitar que haya desigualdad” con los pequeños comercios de barrio que están obligados a cerrar por la cuarentena estricta que está atravesando el AMBA y, al mismo tiempo, alentar la compra online o por WhatsApp.
“El Municipio de Lanús, a través de su área de Control Comunal, estableció medidas para evitar la competencia desleal por parte de supermercados e hipermercados que tengan sucursales en el distrito. A partir de ahora sólo venderán productos esenciales, favoreciendo así la compra de productos no esenciales como textiles, artículos de electrónica, artículos de bazar y juguetes a pequeños comerciantes que realicen operaciones online o vía WhatsApp, no de manera presencial, ya que se encuentran cerrados al público”, cita el texto enviado por dicho municipio.
En Tres de Febrero, se solicitó que los supermercados, hipermercados y mayoristas solo vendan alimentos, productos de higiene y de limpieza, ferretería y garrafas y en el caso de no cumplir se aplicaran multas. Esta acción no habría sido bien recibida por el sector.
Por otra parte, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y la Federación de Comercio e Industria de la ciudad de Buenos Aires (Fecoba) habían solicitado hace varias semanas una medida de este tipo.
“Los locales de grandes superficies siguen ofreciendo productos que no son de primera necesidad y plantea una desigualdad con los pequeños comercios de barrio, que deben permanecer cerrados en la cuarentena por la pandemia de Covid-19”, dice un comunicado de CAME del pasado 25 de mayo.