Luego de semanas dramáticas en la que cientos de personas combatieron noche y día a los incendios forestales en la provincia de Corrientes, cerca de un millón de hectáreas sucumbieron ante el incontenible avance del fuego –cifra que equivale al 11% de la superficie de la provincia y abarcó el 13% del Parque Provincial Esteros del Iberá-.
Pero afortunadamente el panorama fue recomponiéndose paulatinamente y las lluvias registradas en los últimos días contribuyeron a mitigar la angustiante sequía que llevaba meses comprometiendo la fauna y flora del litoral argentino.
No solo eso, las precipitaciones trajeron agua a los Esteros del Iberá y la naturaleza busca retornar a sus días de normalidad, luego de haber atravesado el infierno que amenazó con llevarse todo. Así, las imágenes captadas durante el último fin de semana en esa región, en inmediaciones de Portal Galarza y Carlos Pellegrini traen esperanza al noreste del país.
Según lo detalló Misiones Online, una de las fotos que más alegría despertó fue la de una enorme extensión de tierra repleta de pastizales y flores. Ese mismo lugar fue retratado durante el peor momento de los incendios y en ella se veía a un ciervo huyendo del fuego.
Postal similar fue la de un caprincho refrescándose en un charco de agua, situación que contrasta con la foto en la que un bombero mojaba a un ejemplar que intentaba escapar de las llamas.
A menos de dos meses de la finalización de los dramáticos incendios, los Esteros del Iberá, exhiben un reverdecer. El retorno de las lluvias devolvió la vida a las zonas arrasadas por las llamas y la naturaleza muestra, una vez más, su capacidad de resiliencia.