Las esquirlas del Vacunagate (o del escándalo nacional del Vacunatorio VIP) siguen salpicando. Luego de que se conociera que el histórico dirigente del Sindicato de Camioneros, Hugo Moyano, y otros miembros de su familia fueran vacunados contra el coronavirus por fuera del esquema formal; un sorpresivo paro del gremio de recolectores de residuos en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires fue confirmado en las últimas horas.
La medida de fuerza del gremio, comandado por Pablo Moyano (hijo de Hugo), comenzó a las 6 de este martes y se extenderá durante toda la jornada. Y consiste en suspender la recolección de residuos en la vía pública de la CABA.
“El Sindicato de Camioneros, tras reiteradas oportunidades de aviso de medidas, toma está determinación a causa del incumplimiento del pago del bono a los trabajadores esenciales, que durante los últimos meses expusieron su salud y la de sus familias, por mantener la higiene de la Ciudad de Buenos Aires, son castigados con la quita de días de trabajo, lo que significa una perdida salarial”, resumieron en un comunicado oficial del gremio.
El gremio denunció que el ajuste de días laborales que pretende impulsar el gobierno porteño implicará rebajas salariales de hasta 20.000 pesos por mes. Y en las próximas horas se espera que el propio Pablo Moyano brinde detalles sobre la continuidad de la medida de fuerza.
Llamativo “boicot”
En las redes sociales, principalmente en Twitter, vecinos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires iniciaron un llamativo llamado para boicotear la medida de fuerza: convocan a los vecinos a trasladar todos sus residuos a la puerta y vereda de la sede del Sindicato de Camioneros.
Entre los usuarios de la red social del pajarito no tardaron tampoco en sucederse los mensajes que vinculaban la medida con el escándalo que salpica a Hugo Moyano, su esposa y su hijo menor.
La defensa de Moyano
Hugo Moyano, quien tiene 77 años y también se desempeña como presidente del Club Atlético Independiente de Avellaneda, justificó el haber recibido la vacuna Sputnik V y negó rotundamente haber sido parte del mecanismo ilegal de la aplicación de dosis.
“Me vacuné con mi mujer y mi hijo menor con una provisión del Gobierno de la Ciudad para el Sanatorio Antártida. Estoy vacunado porque soy el presidente de dos obras sociales y por la edad que tengo”, se excusó Moyano.