La demanda para evitar que se cierre la escuela Campesina de Agroecología de Lavalle trascendió las fronteras provinciales. El artista León Gieco se sumó al pedido hecho a la Dirección General de Escuelas (DGE) para evitar la suspensión de actividades.
El cantante se sacó una foto con un cartel escrito a mano que reza: “Yo apoyo a la escuela campesina de Agroecología” seguido de su firma.
Es que, tras 11 años de actividad, el establecimiento dejará de funcionar luego del 31 de diciembre próximo, cuando se termine el convenio con la DGE.
Se trata de una situación que ya se ha presentado en otros establecimientos y que genera reacciones debido a que la comunidad académica pierde su entorno, los alumnos quedan sin ese espacio y esa formación y los docentes pierden un lugar de trabajo. La particularidad es que tienen una oferta diferenciada, acorde a las necesidades y posibilidades de los entornos.
Por ello, para evitar esta situación se ha avanzado en una junta de firmas y hacer pública la situación. La Unión de Trabajadores Rurales Sin Tierra es una de las organizaciones que motoriza el reclamo y apoya a la comunidad. Son justamente quienes hicieron pública la foto en Twitter: “Gracias León Gieco por tu Solidaridad! Seguimos en lucha para que la @MzaDGE respete el derecho a la educación en el campo. Que florezcan 1000 escuelas y no se cierre ningún”, apuntaron en la publicación.
Ya habían obtenido el apoyo del Consejo Directivo de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad Nacional de Córdoba que manifestó su repudio a la medida de la DGE.
El caso
La escuela se encuentra en la localidad de Jocolí y tiene 62 alumnos . Es un CENS de gestión social para jóvenes y adultos y el título que otorga está orientado en agroambiente.
Desde la DGE expresaron a este medio que esta medida se tomó luego de detectar la persistencia de irregularidades en varios aspectos que fueron detallados. Se incluye el incumplimiento del diseño curricular previsto, que la directora no reúne los requisitos para desempeñarse en el cargo conforme a la normativa vigente, no se efectúa adecuadamente la carga en el sistema de Gestión Educativa Mendoza, la implementación de alternancia o semipresencial, no cumple con la carga horaria curricular prevista y agregan que algunos de los estudiantes que acuden al establecimiento no tienen completa la información de registro escolar.
Marta Greco, directora de la escuela dijo a Los Andes en una nota de hace unos días: “Esta situación no solo sucede con la escuela campesina, ya que se han cerrado más de 20 centros de jóvenes y adultos. Hay que pensar en nuevos formatos educativos para seguir con la trayectoria educativa y que todos tengan derecho a completar sus estudios y tener su título. La DGE se encarga de garantizar las funciones de 7 docentes y un directivo. Aun así, la escuela campesina decidió continuar con la actividad para aquellos estudiantes que eligen estudiar ahí por su particularidad dinámica y su funcionamiento escolar”.
Es por ello que iniciaron una campaña para juntar la mayor cantidad de firmas posibles para evitar el cierre del establecimiento. Hasta el 15 de diciembre habían alcanzado más de 6 mil en un petitorio que circula en las redes sociales.
Ese mismo día, junto a la mencionada organización se hizo una Concentración Solidaria y Clase Pública en Defensa del establecimiento tras haberse convocado en la explanada de la casa de gobierno para repudiar el cierre.
“Al día de hoy la DGE no se ha comunicado para alguna instancia de diálogo’', sostuvo Greco ayer al programa Muchas Gracias de Radio Nacional. Agregó que han tenido reuniones con referentes nacionales pero todo sigue igual.
Greco explicó que la escuela surgió con el fin de formar a personas que trabajan directamente en el campo, manteniendo el arraigo, y permanecer en el campo, sostuvo. “Hay pueblos y comunidades, donde no quedan jóvenes adultos -ya que se han ido a la ciudad-, expresó.
Para dar un detalle de las condiciones del lugar, detalló que sale un solo micro desde las comunidades huarpes a la villa cabecera, lo que imposibilita la dinámica de las escuelas. Consideró que no existen políticas de movilidad para los estudiantes y la educación en general en el ámbito de la ruralidad.