Luego del tiroteo que se produjo en el partido de Huracán Las Heras y Ferro de General Pico por el Federal A de fútbol, en el que recibió un impacto de bala en su brazo izquierdo el director técnico de este último equipo, volvieron a relucir la inseguridad y la violencia en la zona.
Según indicaron referentes de las inmediaciones de la cancha de Huracán, es una zona “para andar con cuidado” pero no ahondaron en detalles. Lo mismo cuando se lo consultó al Ministerio de Seguridad, desde donde prefirieron no hacer declaraciones.
Por lo pronto, desde la Dirección General de Escuelas (DGE) indicaron que se trabaja con los chicos de las zonas aledañas sobre la prevención. Elena Castro, inspectora general, indicó a Los Andes: “Fundamentalmente se trabaja sobre la prevención. Son situaciones emergentes que son difíciles de determinar, por eso las escuelas, de acuerdo a las secciones y zonas, trabajan en red. Estas son reuniones que realizar con una periodicidad, en donde se hace contacto con el titular de la comisaría más cercana para que, ante estos hechos, inmediatamente concurran a ayudar a la escuela”.
Por otro lado, Castro dijo que se prioriza la comunicación con los padres de los estudiantes, quienes son los primeros que ante estas situaciones asisten a la escuela para retirar a los chicos. “Entonces está pautado y es lo que en la mayoría de las escuelas se lleva a cabo. En tal escenario qué hacemos, cómo nos cuidamos. Estamos en permanente control y prevención de situaciones que pueden pasar en cualquier momento y lugar”, mencionó la funcionaria.
Además, señaló que hay zonas que son más difíciles que otras y están más preparadas para estas situaciones y los chicos, lamentablemente, lo tienen naturalizado. “Al igual que ante el protocolo de sismo, se les explica cómo actuar para cuidarnos entre todos”.
Situación naturalizada
Durante la semana que pasó Marcela Moreira, vicedirectora de la escuela 1-682 Héroes de Malvinas que está en las inmediaciones del estadio y a pocos metros de donde se produjeron los incidentes, dijo en radio Nihuil que las mismas bandas responsables de los incidentes son las que protagonizan balaceras, dejando a la escuela en medio del campo de batalla y que “cuando hay problemas entre las barras, la escuela se transforma en un caos porque comienzan las balaceras”.
“Ha pasado que hemos estado en recreo y hemos tenido que tirarnos cuerpo tierra o entrar a las corridas a la galería por estos disparos”, señaló la docente.
Es por esto que la funcionaria de la DGE sostiene que “los chicos naturalizan estas situaciones”. “Es su contexto, es a lo que están acostumbrados, tristemente. Por eso fundamentalmente se hace este trabajo de comunicación y redes para ver cómo trabajamos, porque no es sólo avisar a la Policía sino ver desde las escuelas cómo se trabaja para abordar estas situaciones”, planteó Castro.
Paralelamente aseguró que es una situación social un tanto compleja ya que en la escuela se mezclan todos los chicos y es por esto que en los proyectos que se realizan en el interior de los establecimientos, donde precisamente lo que se busca es poder integrar a los niños para que ellos sean portavoces de que en la escuela estamos todos juntos, jugamos en los recreos, participamos de las actividades. “Esto se tiene que trasladar al barrio, ahí está la parte más difícil, pero es lo que la escuela tiene como centro de interés para poder ayudar”, dijo.
Castro indicó que en las escuelas se trabaja el cuidado de sí mismos y que la convivencia es uno de los temas que se abordan desde esta perspectiva. “Estamos trabajando para el año que viene poner más aún el foco ahí. Ha sido todo un año en que los chicos no han tenido vínculos. Este año, cuando volvimos a la presencialidad, se ha podido ver que los chicos necesitan el contacto pero hay que ver cómo, dentro de ese contacto, se aborda”, apuntó la funcionaria.
Por otro lado, indicó que fue un año muy atípico y que tuvieron que empezar de cero con los más chicos, a quienes les faltó toda una etapa de socialización y vínculo por la pandemia.
¿Cómo se trabaja en la zona?
José Villavicencio, del áre de Desarrollo Social de la Municipalidad de Las Heras, comentó que se trabaja con un seguimiento de cada familia para determinar qué necesidades tienen. Dijo que esto se hace no sólo en esta área sino también, de la misma forma, en el resto del departamento. “Se abordan las necesidades de acuerdo a cada familia. Pueden ser frazadas, techos o algún medicamento. Es muy amplia la necesidad”, indicó.
Villavicencio también explicó que allí operan el área de discapacidad, de adultos mayores, de género y diversidad pero siempre a demanda, porque para ellos es “imposible” salir a levantar pedidos ya que no se le puede dar cobertura. “En general se camina la calle y la gente se acerca y te dicen. Y en eso puedo decir que el común denominador es el bolsón o módulo alimentario. Recordemos, de todas maneras, que allí el nivel socioeconómico es medio, no hay asentamientos”, remarcó.
Para finalizar, dijo que la problemática relacionada con la violencia de género se incrementó por lo vivido en la pandemia, pero que de violencia relacionada con lo sucedido en el partido sólo están al tanto por los trascendidos en los medios de comunicación.
