Al igual que los médicos, enfermeros y otros trabajadores de la salud, los policías se encuentran desde el arranque de la pandemia en la primera línea de batalla. Abocados a patrullar las calles, controlar documentación en puestos fijos y atender en las comisarías, entre otras tareas, nunca dejaron de salir a la calle. En este período, en total se han infectado con el virus Sars-Cov-2, 420 miembros de la Policía de Mendoza, entre los cuales 157 ya fueron dados de alta y 263 continúan en tratamiento, por lo que no están concurriendo a sus habituales puestos de trabajo.
Entre ellos 200 prestan servicio en el Gran Mendoza; 31, en el Este; 24, en Valle de Uco y 6, en San Rafael. Pero, además, se le suman alrededor de 680 efectivos que se encuentran aislados a la espera de un diagnóstico.
Así, con 943 agentes menos, la fuerza encara los operativos para garantizar que se cumpla lo dispuesto por el gobierno provincial con motivo de frenar los festejos juveniles por el Día de la Primavera.
En primer lugar, la prohibición de circular en todo el territorio desde el mañana, desde las 16, hasta el martes a las 5.30. En segundo, la restricción de salidas recreativas y actividades en espacios públicos, desde las 7 de hoy hasta las 5.30 del martes.
Como precisó el ministro de Seguridad, Raúl Levrino, durante la conferencia de prensa de ayer, la Policía de Mendoza cuenta con 9.500 efectivos entre hombres y mujeres, por lo que la actividad no se verá resentida. De hecho, días atrás, desde la cartera explicaron que ante los casos positivos y aislados se van reorganizando las tareas para seguir atendiendo todas las funciones, que se dan principalmente en las comisarías, unidades especializadas y de patrullaje, entre otras.
En cuanto a la actuación de la fuerza, el funcionario remarcó que se vienen implementando controles y operativos en toda la provincia con la asignación de 3.000 efectivos y 250 puestos fijos y dinámicos. Mientras que, para los próximos días, adelantó que se profundizarán estas acciones sobre todo en el Gran Mendoza, con 2.100 efectivos y 175 puestos.
Los controles estarán sobre todo apostados en zonas turísticas, parques y alta montaña en toda la provincia. “En el Gran Mendoza hacemos hincapié en lo que es el perilago, Potrerillos, zona de Cacheuta, El Carrizal y el parque general San Martín, también en el Valle de Uco y en el sur en el ingreso a los Nihuiles y Valle Grande”, enumeró el ministro.
En tanto destacó que para llevar adelante estos controles se coordina con los intendentes de cada departamento. “Las acciones que se llevan a cabo en función de estos operativos van a tener una fuerte presencia de personal municipal, preventores y personal de inspección”, adelantó.
Encuentros prohibidos
Por otra parte, Levrino hizo hincapié en la solidaridad de los vecinos que han denunciado juntadas ilegales. “En la etapa de aislamiento (primeros tres meses) tuvimos un pico de 900 llamadas en un día, y hoy, en distanciamiento, hemos tenido picos de 550, con todo lo que significa en cuanto a desplazamiento del recurso”, relató. En tanto detalló que estos contactos telefónicos por reuniones clandestinas se profundizan los jueves, viernes y sábado a partir de las 20.
En los operativos que motivan estas denuncias, con la colaboración de las fuerzas municipales, han podido detectar hasta hoy 120 fiestas clandestinas, en las que se han llevado a cabo a clausuras, multas y arrestos con 8.000 personas imputadas.
En tanto el ministro aseguró que han percibido una disminución en la movilidad en estos últimos días, lo que atribuyó sobre todo a los controles y operativos.