La leche materna es un baño de inmunidad que se le da al recién nacido. Ninguna fórmula de leche ha podido igualarla. Sigue siendo el alimento indiscutible en lo que respecta a la nutrición y la inmunidad del recién nacido.
La leche materna es un trasplante de tejido vivo porque no solamente contiene hidratos de carbono, aminoácidos, y grasas sino múltiples factores anti infecciosos, células que sirven para las defensas, o sea las llamadas células madres, células con capacidad pluripotencial para que el organismo las pueda utilizar hasta para formar neuronas.
Hay un eje de comunicación entero-neuronal. A través del intestino nosotros estamos ayudando a darle esta transformación durante los primeros 1000 días a los bebés.
Rol relevante de la Neonatología
A los neonatólogos les cabe un papel relevante en la estimulación del acompañamiento familiar en la lactancia materna porque ante el hecho de que los partos se hagan en los hospitales, se le quitó el rol protagónico que tenía la familia al lado del recién nacido.
Hoy respetamos “ahora sagrada” como la hemos denominado, es decir, la primera hora de vida del bebé. Entonces todos los recién nacidos que están estables al igual que la mamá son dejados en contacto piel a piel entre los dos.
De esta manera se garantiza que tenga una lactancia exitosa.
Infecciones respiratorias y leche materna
Amamantar es crucial para prevenir problemas respiratorios por lo menos los primeros 6 meses de vida.
La madre con su leche le está pasando una copia del sistema inmune con todos los anticuerpos que la madre pudo fabricar. Él bebe con solo tomar su leche materna ya tiene este trasplante inmunológico. Aun cuando la mamá esté resfriada, le proponemos que se ponga un barbijo pero que siga amamantando a su bebe.
Bebes que quedan hospitalizados en Neonatología
Aquellos recién nacidos que por distintas razones han quedado en neonatología internados, son cuidadosamente alimentados con leche materna también. Aun cuando no pueden succionar.
El bebe para poder alimentarse necesita tener una succión y una deglución coordinada, un intestino sano que no haya tenido ningún tipo de hipoxia, que les pasa a los prematuros muy pequeños.
Primero les colocamos una pequeña sonda que haga de bypass la zona de la encrucijada del digestivo (retro faringe) y de esa manera el alimento pasa directamente al estómago. Con un consultorio de lactancia materna que es muy efectivo, ayudamos a las mamás a extraer su propia leche y se la almacena en el día para ir dándosela al hijo en forma dosificada a través de una sonda.
Luego en aumento progresivo se va probando la succión para pasarlo al pecho de la mamá.
Es muy buena la idea de todos los Comités de lactancia del país de poner en relevancia este mensaje que parece muy difundido, pero que en la mayoría de las veces no se logra a los 6 meses tener un porcentaje alto de madres que amamantan, porque abandonan esa tarea. Los bebés que se alimentan en este vínculo materno son más sanos, felices y más inteligentes y con cero costos.
