Desde que arrancó con todas sus fuerzas a partir de julio, la curva del coronavirus en Mendoza mantuvo un crecimiento de casos diarios prácticamente constante hasta el récord del 10 de setiembre, con 854 infectados en 24 horas. Pero desde esa fecha en adelante los contagios registrados por día han comenzado a mostrar una leve baja, con oscilaciones que van entre los 400 y 600 casos.
Paralelamente se observa una baja en la velocidad de duplicación de infectados. Tomando los informes elaborados por el senador correntino Martín Barrionuevo, con información del Ministerio de Salud de la Nación, se observa que para el 11 de setiembre la duplicación de casos era cada 12 días. Mientras que una semana después este número ascendió a 16 y el último viernes se ubicó en 22 días. Es decir, que se ha ido prolongando el tiempo en el que la cantidad de contagiados se multiplica por dos.
En tanto el Informe de Situación Epidemiológica que elabora la Asociación de Clínicas y Sanatorios de Mendoza, que toma la duplicación de casos por semana, muestra un panorama similar aun tomando distintos períodos. Allí se observa que el menor tiempo de duplicación de casos en la provincia, desde el inicio de la pandemia, fue de 8 días y se registró desde el 13 hasta el 17 de julio. En tanto la semana del 7 al 9 de setiembre, subió a 13 y del 14 al 20 (último período evaluado) superó los 20 días.
La tasa de positividad es otro dato que se suele tener en cuenta para analizar el comportamiento de la pandemia, lo que ha mostrado un descenso en paralelo. Teniendo en cuenta los datos del Ministerio de Salud de la provincia, este valor trepó a su punto máximo el 10 de setiembre con 53,4% y por estos días ronda el 40%, muy por arriba de la recomendación de la OMS, que sostiene que esa relación debe mantenerse en 10%.
A pesar de que este panorama parecería ser alentador para la provincia, desde el Gobierno fueron cautos al analizar el panorama. “Las pandemias tienen una característica muy particular que es la dinámica, por eso no podemos hablar a esta altura de un descenso”, expuso Gonzalo Vera Bello, jefe del Departamento de Epidemiología. Los números actuales, remarcó, son sólo una foto de una larga película que aún nos queda por ver.
“Ojalá esto fuera la meseta, pero si bien se han registrado menos casos, tenemos que tomar un plazo más largo para hablar de una tendencia”, aclaró el experto. En tanto subrayó que no se puede decir que el pico haya pasado. “Mendoza tiene una población de 1,9 millón y los casos notificados son cerca del 1% de las personas, por lo tanto todavía quedan muchas personas susceptibles al virus”, explicó el funcionario.
En este sentido, se refirió a la inmunidad colectiva, que ocurre cuando se ha infectado una cantidad de individuos tal que su diseminación se ralentiza. De todas formas, entre los científicos todavía se discute sobre cuántos deben contagiarse para lograr ese efecto, pero las teorías van del 20% al 60% de la población. Este cálculo es posible descartando la posibilidad de reinfección, que no se ha verificado en Mendoza pero sí en otros puntos.
Puntualmente, respecto del pico, que según adelantó el profesional la semana pasada se calculaba para entre fines de octubre y principios de noviembre, subrayó que se trata de fórmulas matemáticas que pueden variar. “Son probabilidades, no se sabe en concreto. Si liberamos las fases llegaría antes y si se cierran las actividades, después”, precisó Vera Bello.
En cuanto a una posible explicación sobre esta merma temporal de casos, para el médico podría tener que ver con las altas temperaturas de los últimos días. “Una de las medidas que se toman desde el punto de vista preventivo es la ventilación de los ambientes en oficinas y casas, lo que es más frecuente con estas temperaturas”, deslizó a la vez que recordó la importancia de mantener todos los cuidados tales como distanciamiento social, barbijo y lavado frecuente de manos.
Positivo
Otro indicador que ha mejorado
Para evaluar la evolución del coronavirus en la provincia, la Asociación de Clínicas y Sanatorios de Mendoza viene elaborando informes semanales entre los que detallan, entre otros datos, el número reproductivo efectivo (Rt) del virus basado en 7 días. A diferencia del número reproductivo básico (R0), que representa el máximo potencial epidémico de un patógeno, este último tiene en cuenta además la susceptibilidad de la población, es decir si hay personas vacunadas en contra de la enfermedad (en este caso todavía no) o si algunos tienen inmunidad debido a que previamente estuvieron expuestos al patógeno, tal como diferencia el portal de periodismo científico The Conversation.
En el caso de la provincia el Rt viene cayendo y para la semana del 14 al 20 de setiembre se ubicó en 1,48, mientras que la semana anterior fue de 1,74 y la previa se ubicó en 1,83. Este valor mostró su máximo nivel hasta el momento del 23 al 28 de junio con 3,24.