La conmovedora historia de Joel Sánchez, publicada por Los Andes, llegó a la legislatura provincial

Su historia fue declarada de interés general en la Cámara de Diputados, que lo invitó para darle un reconocimiento. Este diario la visibilizó en 2021 con dos imágenes contrapuestas: que cargando uva y luego recibiendo su título de ingeniero.

La conmovedora historia de Joel Sánchez, publicada por Los Andes, llegó a la legislatura provincial
Joel Sánchez era cosechador y se recibió de ingeniero en la UTN.

Luego de conmover a todo el país por tratarse de una historia inspiradora y llena de esperanza, la historia de Joel Sánchez, el joven de San Martín que pagó sus estudios de ingeniería cosechando uva, publicada por Los Andes el 20 de septiembre de 2021, llegó a la Cámara de Diputados provincial.

Fue a instancias del legislador Gustavo Cairo, presidente del bloque del Pro en Diputados, quien presentó un proyecto para declarar su historia de interés legislativo, iniciativa que finalmente resultó aprobada por sus pares en el recinto.

Tras la publicación de los avatares de este joven huérfano de padre desde muy niño, que trabajó “al calor del sol y con la ropa sucia”, ningún medio dejó de replicar su historia. Luego, los legisladores mendocinos se hicieron eco del logro.

Joel simboliza la Argentina del esfuerzo y el progreso que nos hizo un gran país frente a la cultura del pobrismo y la resignación que se promueve desde ciertos gobiernos nacionales”, sintetizó Cairo en diálogo con Los Andes, para adelantar que el joven será invitado al recinto para recibir un reconocimiento.

Joel, que hoy trabaja en una empresa multinacional en Buenos Aires, había relatado a Los Andes, en una charla íntima y profunda: “Al calor del sol y con la ropa sucia en una finca me imaginé un día levantando el cartel de ingeniero”.

Esta historia llena de sacrificio y dificultades económicas finalmente tuvo su fruto el 2 de agosto pasado, cuando rindió en la UTN “Proyecto Final” y rompió en llanto. Se había convertido en ingeniero electromecánico.

Su mamá puso sin querer otro condimento conmovedor a este logro: el día de su recibida, le llevó a su hijo de regalo la ganchera y la tijera con la que cortaba la uva en distintas fincas como peón. “Para que no te olvides de dónde venís”, le dijo.

Joel Sánchez era cosechador y se recibió de ingeniero en la UTN.
Joel Sánchez era cosechador y se recibió de ingeniero en la UTN.

“Mis hermanos y yo éramos menores y fue la única salida que encontramos para ganar dinero. La tarea era muy sacrificada pero aprendí mucho, le tomé la mano y pude terminar la secundaria. Me sentía motivado para seguir estudiando, siempre había soñado con ser ingeniero aunque muchos me decían que no era para mí, sino para otro tipo de gente, que era muy costoso y que no lo intentara. Pero yo me daba cuenta de que podía, que no había nada que perder. Ingresé al preuniversitario, conté mi historia en la firma constructora José Cartellone, que tomaba pasantes, y quedé seleccionado enseguida, me apuntalaron y me dieron todas las posibilidades para que jamás abandonara mi carrera. Siempre estaré agradecido”, recordó en aquella charla.

Joel se anotó en todas las becas posibles, las que si bien le exigían ir al día, al mismo tiempo le proporcionaban medios para continuar: transporte, comedor, fotocopias y una residencia para estudiantes.

Todos los prejuicios quedaron atrás, que era una carrera infinita, que perdería tiempo y que se necesitaban recursos”, dijo, para agregar: “Impulsemos a esas personas a seguir, a pelearla, a levantar también ese cartel”.

Hoy, Joel y Bianca, su novia, viven en Buenos Aires. Impensado. “Si yo apenas conocía la Ciudad de Mendoza”, señala y se ríe, todavía en medio de un sueño que él hizo realidad a puro mérito.

Tenemos algo para ofrecerte

Con tu suscripción navegás sin límites, accedés a contenidos exclusivos y mucho más. ¡También podés sumar Los Andes Pass para ahorrar en cientos de comercios!

VER PROMOS DE SUSCRIPCIÓN

COMPARTIR NOTA