Un ejemplar de ocelote, un felino de tamaño intermedio entre el Tirica (Leopardus guttulus) y el Puma (Puma concolor), murió luego de ser atropellada dentro del Parque Nacional Iguazú en la provincia de Misiones. La hembra estaba preñada y no pudieron salvar a la cría. Las autoridades pidieron respetar las normas de tránsito y extremar las precauciones al conducir en áreas protegidas.
“Finalizamos el día con una triste noticia. Nuevamente, el no respetar las velocidades en el Parque Nacional Iguazú se cobra una vida, en este caso un ejemplar de ocelote (Leopardus pardalis)”, comunicó el refugio Güirá Oga a través de las redes sociales.
En el posteo agregaron que “se trataba de una hembra preñada. Luego de fallecida, el equipo de veterinarios del Refugio, realizó una apertura de emergencia para evaluar la viabilidad de la cría. El útero se encontraba desgarrado como así la pared abdominal y la cría se encontraba en el subcutáneo”.
Desde el refugio lamentaron el hecho y aseguraron que “fue un accidente que respetando las velocidades se pudo haber evitado”.
Más de 5000 animales mueren atropelladas al año
Según un informe realizado por Vida Silvestre, en Misiones más de 5000 animales mueren al año por esta problemática en rutas que atraviesan áreas protegidas. “En los últimos años, los atropellamientos de animales silvestres toman notoriedad como una amenaza importante para la fauna de nuestro país”, aseguró Lucía Lazzari, coordinadora de paisajes terrestres de la Fundación Vida Silvestre Argentina.
“A pesar de las señalizaciones, el número del análisis que realizamos podría estar subestimado, ya que hay pocos registros de algunos grupos como anfibios, que son muy impactados, pero no son reportados”, agregaron.
La organización insistió en que quienes circulen dentro de áreas protegidas deben hacerlo a una velocidad máxima de 40 km/h, y que esa norma “debe ser respetada para resguardar el ambiente y por la seguridad de quienes viajan en los vehículos”.