Actualmente hay 1.777 niños y adolescentes que son buscados por las autoridades judiciales y policiales de la provincia de Corrientes. Aunque la búsqueda se encuentra activa, al día de hoy, no existe un sólo registro confiable y unificado que asiente estas causas.
Según Noticias Argentinas, nadie puede aseverar que las desapariciones se deban al fenómeno de trata de personas con fines de explotación porque también se podrían haber producido accidentes, secuestros por parientes u otras hipótesis que, en la actualidad, se multiplican a diario en la complicada causa por la aparición con vida de Loan Danilo Peña.
En medio de la creciente indignación de los ciudadanos correntinos por la gestión del gobernador Gustavo Valdés y sus funcionarios encargados de seguridad y justicia, quienes designaron al comisario Walter Maciel -imputado por encubrimiento en el caso del presunto rapto de Loan y con antecedentes por denuncias de abuso sexual-, el jefe de los fiscales de Corrientes, César Sotelo, afirmó rotundamente: “Corrientes no es un área de captación de menores”.
Informes recientes de investigadores, han revelado que el litoral nacional, particularmente la provincia de Corrientes, se ha convertido en los últimos años en un destino de turismo sexual, camuflado bajo actividades como la pesca o el automovilismo.
El gobernador radical Gustavo Adolfo Valdés y su hermano Juan Pablo Valdés, intendente de Ituzaingó y sucesor potencial en la gobernación, están plenamente conscientes de esta situación según informes reservados y advertencias de organismos internacionales, informó Noticias Argentinas.
A pesar de la reciente implementación del nuevo Código Procesal Penal en la provincia, los índices delictivos continúan en ascenso. Las asignaciones presupuestarias para mejorar la eficiencia judicial son escasas y, lamentablemente, favorecen el fenómeno conocido como “puerta giratoria”, donde los delincuentes entran y salen de las cárceles con facilidad.
Corrientes, catalogada como una de las provincias más inseguras del país, enfrenta además crecientes rumores sobre el auge del turismo sexual. Estos rumores están vinculados frecuentemente a tours de pesca deportiva y eventos religiosos, como procesiones en honor al Gauchito Gil, que esconden redes de prostitución.